La mañana está siendo complicada en la playa del Arenal de Xàbia, donde hay fuertes corrientes y olas de dos metros. Los socorristas de la Cruz Roja, nada más iniciar el servicio y sin que todavía les diese tiempo a izar la bandera roja, ya se han tenido que lanzar a toda prisa al agua. Una familia de cinco miembros, entre los que había una niña de unos 11 años, estaba en apuros. Tenían dificultad para volver a la orilla. Se hallaban en el centro de la ensenada del Arenal, donde, cuando hay temporal, se forma un remolino que impide salir a tierra.

Los socorrristas han sacado del agua a los bañistas. Conocen a la perfección esta playa y saben los puntos por los que las fuertes corrientes ayudan a volver a la orilla. Han izado la bandera roja y están avisando por megafonía de que está prohibido bañarse. Están manteniendo a raya a los turistas, aunque siempre hay alguno que se hace el longuis e intenta burlar la vigilancia. De momento, los socorristas de la Cruz Roja, que están apostados por toda la orilla, no han tenido que llamar a la Policía Local. Los agentes ya han impuesto otros años multas de 750 euros a los bañistas que hacen caso omiso a la bandera roja y se meten en el mar.