El concejal del Poble Nou de Benitatxell Toni Colomer ya puede sacar pecho. No es un tránsfuga. El juzgado contencioso administrativo número 2 de Alicante ha considerado que se vulneró el derecho fundamental de este edil a la participación política cuando el secretario municipal consideró que su voto no contaba en la moción de censura que firmó junto a tres ediles de Compromís y dos independientes para desalojar al actual alcalde, Josep Femenia, de Red. El magistrado sostiene que la moción de censura debió tramitarse. Pero en la sentencia también advierte de que ahora las circunstancias han cambiado y deberán volver a sumarse los tres concejales de Compromís que se retractaron tras presionarles su partido, que no quería que pactaran con la independiente Nieves García, que está procesada por corrupción. Por tanto, la moción de censura sigue empantanada.

La sentencia refleja bien lo rocambolesca que es la política en el Poble Nou de Benitatxell. Colomer logró el acta por el PP, partido que lo expulsó cuando se alió con García, que era primera teniente de alcalde popular cuando presuntamente amañó certificaciones y pagos por medio millón de euros. Pero el juez no ve efecto alguno en esa expulsión, ya que Colomer no era militante del PP. Además, incide en que el pleno del Poble Nou de Benitatxell rechazó que este edil adquiriera la condición de no adscrito. Por tanto, Colomer sigue perteneciendo al grupo municipal popular. Y está blindado. Está en la oposición, que tiene la mayoría y que tumbará las propuestas de la otra edil del PP y del gobierno local para convertirlo en no adscrito.

La sentencia no cambia mucho las cosas. Los ediles de Compromís tiene prohibido por su partido pactar con una concejala procesada por corrupción que está ya a puertas de juicio.