La mayor demanda de droga para distribuir durante la época estival en Ibiza provoca que las redes de narcotráfico traten de enviar alijos vía marítima a través del ferry que zarpa a diario desde Dénia. La Guardia Civil no es ajena a ello y gracias a los mayores controles que realiza sobre los pasajeros y vehículos en el puerto de Dénia logró interceptar el pasado martes un envío de 15 kilogramos de metanfetamina -«cristal»- que transportaban en un vehículos dos jóvenes holandeses de 25 años que fueron detenidos y encarcelados tras pasar a disposición judicial.
La intervención fue realizada por agentes de la Guardia Civil especializados en resguardo fiscal que inspeccionaron un vehículo que pretendía embarcar en el ferry de Dénia a Ibiza.
La droga, con la que se podría haber obtenido un beneficio de 400.000 euros, estaba en un compartimento del maletero que disponía de un mecanismo de apertura electrónica que se activaba con un interruptor camuflado en la parte de los pasajeros.
Los agentes revisaron el maletero y aunque no había nada anómalo a simple vista sí detectaron algún detalle que les hizo sospechar que los dos jóvenes holandeses podrían llevar droga. Por ello, llevaron a cabo un examen más minucioso y desmontaron una de las placas de separación del suelo del maletero.
Envasada al vacío
Los guardias civiles no se equivocaron porque nada más retirar la placa encontraron el alijo de «cristal». Estaba envasa al vacío y aún estaba en grandes piedras, por lo que aún tenía que ser cortada en Ibiza con sustancias adulterantes para distribuirla a los consumidores de droga.
Los dos jóvenes holandeses, ambos de 25 años, fueron detenidos por la Guardia Civil y ayer pasaron a disposición del juzgado de Instrucción número 3 de Dénia, que acordó su ingreso en prisión.
Según la Guardia Civil, la metanfetamina figura en el último Informe Mundial sobre Drogas como la sustancia estupefaciente que plantea una mayor amenaza para la salud. Se trata de una droga sintética que tiene efectos estimulantes y aumenta la dopamina en el cerebro, que es un neurotransmisor encargado de activar sensaciones como la felicidad, el placer, e incluso el control de las funciones motoras.
La droga conocida como «cristal» suele consumirse inhalada por vía respiratoria, fumando sus vapores y a través de vía intravenosa, consiguiendo un nivel máximo de adicción.
La Comandancia de Alicante afirma que el consumo de esta droga está creciendo en Europa, según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), especialmente en zonas de ocio y turísticas, debido a la sensación de euforia e hiperactividad que provocan, aunque está comprobado que daña el corazón y el cerebro, causando en ocasiones comportamientos psicóticos, agresividad y en muchos casos, la muerte por sobredosis.
La Guardia Civil investiga ahora la procedencia del alijo decomisado en el puerto de Dénia, aunque todo apunta a que la droga sintética incautada se «cocinara» fuera de España, en algún país de la Unión Europea.
