Los tres concejales de Compromís en el Poble Nou de Benitatxell tienen un pie (o los dos) fuera de la coalición. La ejecutiva nacional les había dejado muy claro que si presentaban una moción de censura con la concejala independiente procesada por corrupción, Nieves García, y el edil tránsfuga del PP, Antonio Colomer, su formación política no titubearía y los expulsaría «inmediatamente». De momento, han salvado la expulsión por un imponderable: el secretario municipal no admitió la moción de censura al considerarla ilegal, dado que la firmaba el concejal no adscrito (por tanto, tránsfuga) Antonio Colomer.

Eso sí, la coalición les ha abierto expediente disciplinario. El portavoz municipal de Compromís, Miquel García, y los ediles Jorge Pascual y María Teresa Roldán, no esquivarán la sanción. Las fuentes de Compromís consultadas ayer por este diario confirmaron que el expediente «va en la línea de la expulsión». El comité de garantías lo está tramitando sin urgencias. Si la moción de censura continuara adelante, sí que hubiese pisado el acelerador a fondo y los ediles estarían ya apartados del partido.

«Ahora mismo hay una situación de impasse. Pero es seguro que los concejales tendrán algún tipo de sanción», precisaron las fuentes antes citadas.

El portavoz municipal de Compromís, Miquel Garcia, que admitió que la decisión de pactar con la oposición para desbancar al actual alcalde, Josep Femenia, de Red, contaba con el apoyo unánime de la asamblea local, pero no estaba avalada por los otros órganos de la coalición, también avanzó que acudirían al contencioso administrativo para defender la legalidad de la moción de censura. Si se llegara a votar, el alcalde propuesto sería, precisamente, Miquel Garcia. En ese caso, los tres concejales acabarían fuera de Compromís. Si desisten, todavía podrían salvar la papeleta con una expulsión temporal. La coalición tampoco quiere perder a un colectivo, el de Benitatxell, de gente joven que ha encadenado dos elecciones municipales seguidas ganadas (las últimas por 17 votos sobre Red). Pero Compromís, según las mismas fuentes, no puede consentir que sus ediles se alíen con un tránsfuga del PP y una edil acusada de amañar pagos de obras públicas por 500.000 euros.