La cerdita vietnamita «Montgó» volverá a caminar. A Patricia Brú se le cayó el alma a los pies cuando, al descubrir la piara de cerdos vietnamitas asilvestrados de Xàbia, vio a una cría que iba detrás de su madre arrastrando las patas. Los voluntarios que recogen a estos animales le dijeron que la cerdita, que tiene 3 meses, acabaría sacrificada. Patricia contactó con

numerosas protectoras y halló un santuario en Galicia que la adoptaría. Pero había que operarla. Y viajó toda una noche con su padre desde Xàbia a Vigo para que intervinieran al animal en una clínica veterinaria. Todo ha salido bien. La factura de la operación estará entre cuatrocientos y mil euros.