El doctor Gonzalo Álvarez-Ossorio Sebastián trasladó a sus hijos que quería que el ánfora que le regaló en los años 70 un amigo acabara en el museo de Xàbia. Sus hijos cumplieron ayer la voluntad de su padre, ya fallecido. El Seprona supervisó la donación y trasladó la pieza, que es del siglo I antes de Cristo, al museo Soler Blasco de Xàbia. El arqueólogo Joaquim Bolufer afirmó que el ánfora procede de Itálica y, en concreto, de Apulia y se utilizó para transportar vino. Se halló en aguas del cabo de Sant Antoni.