Investigadores y veterinarios de la Fundación Oceanogràfic han comenzado a analizar las posibles causas que han ocasionado la muerte de un joven delfín listado que apareció varado el martes en una playa de Dénia, con el fin de aportar conocimiento sobre el estado de salud de las poblaciones en el Mediterráneo y las amenazas con las que se encuentran en la actualidad. Durante las últimas horas, científicos de la fundación están realizando al ejemplar joven de delfín listado, con 59 kilos peso y 1,84 metros de longitud, las pruebas necesarias y con el rigor exigido para poder obtener más información sobre las causas de la muerte del animal.

El responsable del área de conservación del Oceanogràfic de València, José Luis Crespo, ha explicado que «cuando un animal de estas características llega a la costa, suele ser porque presenta algún problema grave de salud». Los delfines, «a diferencia de las tortugas marinas, son animales que llegan muy débiles arrastrados por la corriente, y, aunque en algunos casos es posible su recuperación y tratamiento con fines a su reintroducción, esto no siempre es así», apunta. «No obstante, -añade el experto-, nuestra misión siempre es evaluar y atender al animal en todo momento para minimizar su sufrimiento y tratar de recuperarlo siempre que se pueda. En casos como el de ayer en el que el animal murió poco después de llegar a la playa, lo fundamental es investigar sobre las causas desencadenantes del fallecimiento».

El Oceanogràfic de València, junto a la Cruz Roja, ha estado realizando durante el mes pasado demostraciones en las playas de

Gandia, Oliva, Guardamar del Segura, Xàbia, Alcossebre y Nules, donde se ha informado de una forma gráfica y práctica sobre cómo deben actuar los ciudadanos ante la presencia de un animal varado, principalmente tortugas marinas y delfines. Los miembros de la Fundación Oceanogràfic han dado a conocer, además, la riqueza biológica del Mar Mediterráneo.