Hay retrasos y retrasos. Llegar siglo y medio tarde es remolonear a gusto. La conselleria de Cultura inició el pasado 1 de febrero el expediente para ampliar el Bien de Interés Cultural (BIC) de la iglesia gótica de Sant Bertomeu de Xàbia. Ahora ha dado diez días a los interesados para que presenten alegaciones. El BIC abrazará más de cien casas del centro histórico de Xàbia. El servicio de Patrimonio Cultural de la Generalitat Valenciana precisa que esas viviendas forman parte del «entorno visual y ambiental» del templo. En ese perímetro, también hay inmuebles que ahora, con la ampliación del BIC, se declararán Bien de Relevancia Local (BRL). Son los antiguos palacios de Antoni Banyuls (el actual museo Soler Blasco), del siglo XVII, el palacio de los Sapena (ahora restaurante Palau), del XV, o la casa señorial de Els Xolbi (también conocida como Casa Candelaria), también del XV. Igualmente serán BRL el Ayuntamiento, que es del XVIII, y el mercado, que, aunque de traza gótica, se construyó en 1946.

Otro edificio al que Patrimonio quiere darle esa protección es la iglesia de Nuestra Señora del Loreto. Pero esa iglesia hace la tira que desapareció. Se alzaba en lo que ahora es la plaza del carrer Escola, en la que se mantiene una cruz con baldaquino (todo es de piedra tosca) con escudos franquistas. El único recuerdo de la antigua capilla es su representación en miniatura en el remante de una pequeña fuente. La iglesia del Loreto está ahora, de hecho, en el puerto. Ésta del pueblo se demolió en 1870, hace, por tanto, 147 años. Y ya entonces se hallaba en ruinas. Tenía columnas de estilo mudéjar. Se construyó a mediados del siglo XVI. Es evidente que plantear que se declare BRL una iglesia que no existe desde hace siglo y medio responde a un error. El ayuntamiento alegará para que se corrija. Si se protege la plaza, puede darse un problema. Patrimonio debería autorizar la retirada de los escudos franquistas del baldaquino de piedra tosca. El consistorio ya hace tiempo que está preparando la compleja operación de tallarlos de una pieza y quitarlos sin dañar la estructura. Necesita montar un andamio y que el trabajo lo lleve a cabo un maestro tosquero. El ampliación del BIC de la iglesia-fortaleza de Sant Bertomeu supone proteger el entorno urbano de un magnífico templo gótico que el gobierno de la República declaró en 1931 monumento artístico nacional.