«La situación de riesgo sigue siendo muy elevada», advirtió ayer la consellera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, tras efectuar un vuelo de reconocimiento sobre las zonas afectadas por los incendios de Benitatxell y Bolulla, en la Marina Alta. La consellera reconoció «esas difíciles decisiones que se han tenido que adoptar al haber fuegos simultáneos, de características muy diferentes, con mucha gente trabajando y con una coordinación compleja al contar con el apoyo de distintas administraciones». Del mismo modo que las tareas de extinción han sido compartidas, la consellera apuesta por la colaboración en los futuros trabajos de recuperación que comenzarán con mesas de concertación, así como en las tareas de restauración y en una nueva gestión forestal. Preguntada por los medios Cebrián dijo que con las políticas del actual gobierno de la Generalitat, las zonas calcinadas serán regeneradas y en ningún caso recalificadas.