No era el iceberg del Titanic, pero también entrañaba peligro. Esta mañana flotaba a la deriva en la reserva marina del cabo de Sant Antoni un tronco de dos metros. Los vigilantes de la reserva han avisado al 112 y Salvamento Marítimo ha pedido, a su vez, a la policía de Xàbia que acudiera a remolcar el objeto flotante.

Los agentes han atado a la embarcación policial el tronco, que asemejaba un árbol entero. Lo han llevado hasta el puerto de Xàbia. Así han evitado que una embarcación de recreo o una moto acuática pudiera tropezar con un tronco que, por su tamaño, fácilmente podía provocar accidentes.