El alcalde de Calp, César Sánchez, del PP, salió airoso de la tempestad. El descalabro de los populares en la Marina Alta le pasó una factura asumible. Se dejó un edil al bajar de diez a nueve. Pero su alianza con los independiente de Antonia Avargues ya no es posible, ya que este grupo se quedó ayer sin representación. A Sánchez le tocará buscar nuevos socios y sólo hay una opción posible, Alternativa Popular. Este partido, que sumó dos ediles (también perdió uno) lo encabeza ahora Ana Perles. Casi a la fuerza. El que era su candidato natural, al tiempo que fundador, el excalcalde del PP Javier Morató, está condenado e inhabilitado por fraude fiscal. El hecho de que Morató ya no esté allana el camino para que el actual alcalde pueda entenderse con Alternativa Popular que, al fin y al cabo, es una escisión del PP.

La victoria de anoche de César Sánchez le debe mucho a la fragmentación de la izquierda y al fracaso del PSPV. La lista la encabezaba ahora Santos Pastor. Los socialistas se dejaron un concejal. Ahora tendrán cuatro. No se esperaban este revés. Intuían que estaban más cerca del PP.

Pero al PSPV le ha hecho daño la irrupción de los nuevos partidos. Compromís, con el joven Ximo Perles de candidato (tiene 23 años), se ha ganado un hueco entre el electorado más joven. Consiguió dos ediles. Partía de cero, que es donde lo dejó el exalcalde Ximo Tur.

Mientras, Sí se Puede Calp, la marca de Podemos en este municipio, entró con fuerza. También alcanzó los dos ediles.

La fragmentación de la izquierda ha venido muy bien al PP. Sánchez, que también es diputado autonómico, podrá sacar pecho ante tantos y tantos compañeros de partido que se han dado ahora el batacazo.

El otro grupo que se mete en la corporación calpina es Gent de Calp, que ya contaba con el edil Pedro Jaime Fernández. Su dura oposición al PP le ha dado rédito electoral. Ha logrado un concejal más y es la tercera fuerza más votada.