La responsable municipal de Fiestas es además una de las socias fundadoras de los Moros y Cristianos de Calp y pertenece a la filà Mascarats. Suyo es el diseño del estandarte de la asociación festera.

¿Cómo se llega a esta situación?

La asociación vino a proponer que se aplazara al domingo la procesión, pues entienden que el desfile brilla más en sábado y viene más gente. En principio, les dije que haría consultas y lo estudiaría, aunque no era partidaria. Cuando lo planteé en el ayuntamiento, la mayoría rechazábamos la propuesta.

Y ahí comienza el conflicto...

A mí nadie tiene que contarme cómo es el desfile. Llevo 33 años en la fiesta y sólo he dejado de desfilar dos veces, cuando faltaron mis padres. Es un acto cada vez más brillante, y nunca se ha notado si era sábado o domingo. Es más, la de 1994, a cargo de los Berberiscos, fue una de las capitanías más brillantes que se recuerdan, y se hizo en domingo. Si yo viera que por no hacerse el desfile en sábado la fiesta fuera a menos, me lo pensaría. Pero es que es mentira.

¿La procesión es inamovible?

Yo no me escondo: El Crist no es negociable. La procesión se celebra el 22 de octubre desde 1744, y sólo una vez no fue así. Tras la guerra civil, quedó destruida la imagen del Crist y se tuvo que hacer otra. Mi padre, mi tío y otra persona fueron con una camioneta a Valencia a recogerla. En Calp la esperaban para entrarla en procesión hasta la iglesia. Pero se puso a diluviar, y tuvieron que dejar la imagen en la primera casa de la entrada del pueblo. La procesión se aplazó al día siguiente, pero es la única vez que ha pasado y era por circunstancias muy especiales.

¿Y si finalmente se anulan los Moros y Cristianos?

Lo lamentaría, pero yo al Crist no lo cambio por nada. No hay negociación que valga.