Los vecinos y bañistas de la playa del Blay Beach de Dénia, en el litoral de les Marines, están acostumbrados a que los temporales se traguen la arena con la que, de tanto en tanto, se regenera este tramo de costa. Sin embargo, ahora la regresión de esta playa es mucho más grave. Los bañistas comentaban ayer que "el mar nunca había estado tan alto". Ya no queda ni rastro de arena. El mar ha ganado el pulso y sigue avanzando. Ahora el deterioro en los muros que cierran las parcelas de primera línea es más que evidente. El oleaje socava estos muros que ya muestran amenazantes grietas. La fuerte erosión en este tramo del litoral de les Marines ha dado al traste hasta ahora con cualquier intento de recuperar una franja de playa que ya parece definitivamente perdida.