El secretario de Defensa de EE.UU., Mark Esper, informó este miércoles que retirará 11.900 militares de Alemania, de los cuales 5.600 se reubicarán en otros países de la OTAN, principalmente Bélgica e Italia, y otros 6.400 regresarán al país, dentro del plan del presidente estadounidense, Donald Trump.

"El actual plan del Comando de Europa reubicará aproximadamente 11.900 efectivos militares de Alemania -de unos 34.500 existentes- de manera que se fortalecerá la OTAN y asegurará la disuasión de Rusia", indicó Esper en una comparecencia ante los periodistas en el Pentágono.

De estos 11.900, casi 5.600 serán trasladados a otros países de la OTAN, y cerca de 6.400 retornarán a EE.UU., aunque muchos de estos o unidades similares llevarán a cabo despliegues rotativos de regreso en Europa.

Esper agregó que también se moverán varios de los centros de operaciones fuera de Alemania y compartirán ubicación con socios de la OTAN como Bélgica e Italia, lo que mejorará "la eficiencia operacional y disponibilidad".

Sobre los tiempos, ofreció un horizonte amplio al apuntar que "algunos de estos movimientos podrían producirse en semanas" mientras que "otros tomarían más tiempo".

Trump anunció a mediados de junio su intención de reducir el número de tropas estadounidenses en Alemania, en represalia por el insuficiente gasto en defensa de Berlín y por, a su juicio, aprovecharse de EE.UU. en cuestiones comerciales. Estados Unidos tiene desplegados actualmente unos 52.000 efectivos en las bases alemanas, de los cuales unos 34.500 son soldados en activo y el resto son empleados civiles del Departamento de Defensa.

Alemania es el país de Europa con más tropas estadounidenses, seguido de Italia, el Reino Unido y España. Esos militares llevan en territorio alemán desde el fin de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) y, en tiempos de la Guerra Fría se consideraron como una fuerza de contención frente a la Unión Soviética.