La jefatura del Estado de Sudán, el Consejo Soberano, ha aprobado este viernes la ley que ratifica la criminalización de la mutilación genital femenina, una práctica ancestral que sigue siendo muy extendida en el país árabe. "Aprobar estas nuevas leyes y enmiendas es un paso importante para la reforma del sistema judicial para que se cumpla el lema de la revolución: libertad, paz y justicia", ha destacado el primer ministro sudanés, Abdalá Hamdok.

El Ministerio de Justicia ha publicado un comunicado en el que destaca que esta práctica de la mutilación genital "degrada la dignidad de las mujeres". En la práctica, criminaliza la circuncisión femenina y reconoce, entre otros, el derecho que tienen a acompañar a sus hijos fuera del país.

En mayo el Gobierno ya aprobó una modificación del código penal que prevé hasta tres años de prisión para los responsables de mutilación genital femenina.

Las organizaciones de defensa de los Derechos Humanos han expresado su satisfacción por esta normativa tras década de campaña contra esta práctica.

En Sudán casi nueve de cada diez mujeres han sido sometidas a la ablación, considerada un "rito de paso", según datos de la ONU. Esta mutilación genital también se practica en otros países de África, Oriente Próximo y Asia, en particular en zonas rurales.

Las mujeres fueron clave en la revuelta que acabó en abril de 2019 con tres décadas de gobierno del dictador Omar Hasán al Bashir, ahora en prisión. En agosto de 2019 se formó un gobierno de transición con representación de civiles, incluidas mujeres, y militares para gestionar una transición a un gobierno civil.