Italia ha registrado 165 nuevos fallecimientos en las últimas 24 horas, la cifra más baja desde el 9 de marzo, y suma ya 30.560 muertos desde el inicio de la emergencia en el país en febrero, según el último balance oficial de Protección Civil. El número de contagios, es decir, 802 nuevos casos desde el sábado, el mejor dato desde el 6 de marzo.

En las últimas 24 horas ha habido 2.155 nuevos curados y se sigue reduciendo el número de hospitalizados y de ingresados en unidades de cuidados intensivos. Ante este panorama, Italia empieza a pensar en cómo será su verano. "Este verano no seguiremos en los balcones y la belleza de Italia no permanecerá en cuarentena. Podremos ir al mar, a las montañas y disfrutar de nuestras ciudades", ha asegurado Conte en una entrevista publicada por el diario "Corriere della Sera".

Y ha matizado que espera conocer más datos para observar cómo evoluciona la curva de contagios antes de ofrecer indicaciones claras sobre cómo será desarrollarán este año las vacaciones de verano en el país.

Además, ha argumentado que "sería bueno" que los italianos pasaran sus vacaciones en Italia, incluso si lo deben hacer "con reglas y precauciones", para poder ayudar al sector del turismo que representa el 13 % del producto interior bruto (PIB) y que se está viendo duramente afectado por esta pandemia del coronavirus.

"Van a ser meses muy difíciles, nos enfrentamos a la prueba más dura desde el período de posguerra. Tendremos una fuerte caída en el PIB y las consecuencias económicas serán muy dolorosas", ha destacado Conte, cuyo Gobierno espera que la economía italiana retroceda un 8 % en 2020.

Francia, también a la baja

Francia contabilizó en el último día 70 muertos por coronavirus, el balance diario más bajo desde el inicio del confinamiento, y suma desde el principio de la epidemia 26.380 fallecidos por esta patología, según las autoridades sanitarias. Del total de víctimas mortales, 16.642 se dieron en hospitales y 9.738 en residencias y centros de dependencia.

En la víspera del inicio de la desescalada del confinamiento, el país tiene este domingo 22.569 pacientes ingresados por coronavirus, tras registrar 253 ingresos en el último día. De ellos, 2.776 están en los servicios de cuidados intensivos con una forma grave de la enfermedad, 38 más en las últimas 24 horas, si bien el saldo en reanimación es negativo, con 36 pacientes menos en total.

Las cuatro regiones del noroeste del país, incluida la región parisina, son las que sufren el mayor golpe ya que agrupan el 72 % de los casos del país, mientras que la incidencia hospitalaria en el resto del territorio es bastante baja. Estas regiones (Île de France, Aubernia-Ródano-Alpes, Altos de Francia y Gran Este) son las que dictarán las medidas de desconfinamiento más estrictas a partir de mañana lunes, tras pasar 55 días de confinamiento.

Los ciudadanos podrán volver a salir a la calle sin llevar una declaración jurada, si bien el Gobierno recomienda mantener el teletrabajo y las medidas de distanciamiento social, sobre todo a las personas vulnerables. El uso de mascarillas, y los comercios podrán de nuevo abrir al público, a excepción de cafés, bares y restaurantes, que permanecerán cerrados.

Además, entre un 86 % y 89 % de las escuelas del país reabrirán para acoger a alumnos de primaria y último curso de infantil, aunque con una capacidad máxima de 15 niños por clase.

Reino Unido

Por otro lado, en total de 269 personas más han muerto en Reino Unido, hasta alcanzar los 31.855 fallecidos en todo el país, según el último balance del Ministerio de Sanidad británico. Un total de 219.183 personas han sido confirmadas como positivo en todo el país desde el inicio de la pandemia, tras constatar 3.923 nuevos casos más. El número de test realizados en las últimas horas ha sido de 92.837, cerca de los 100.000 diarios fijados como objetivo por el Gobierno.