Los fallecidos en Italia con coronavirus ascienden ya a 16.523, al registrarse 636 más en las últimas 24 horas, una cifra superior a los 525 del domingo, que fue la más baja en casi tres semanas.

Los casos totales desde que se detectó el virus el 21 de febrero son 132.547, 3.599 más respecto al domingo pero una cifra inferior al día anterior, lo que parece confirmar la ralentización de los contagios en Italia, según los datos proporcionados hoy por Protección Civil.

Según su director, Angelo Borrelli, actualmente hay 93.187 personas enfermas, con lo que el número de positivos ha subido en 1.941 en un día, menos que el día anterior, y 22.837 personas ya se han curado, más de mil en un solo día.

La mayoría de los positivos, 60.613, están en aislamiento domiciliario, otros 28.976 están hospitalizados con síntomas y solo 3.898 ingresados en cuidados intensivos, una reducción por tercer día consecutivo.

El neumólogo Luca Richeldi señaló que "los datos confirman sustancialmente la tendencia reconfortante" bajista que se ha registrado en los últimos días y que "demuestra que las medidas de confinamiento están dando resultados" en Italia.

El Gobierno italiano ha aprobado un confinamiento total nacional y la suspensión de todas las actividades productivas no esenciales hasta el 13 de abril para intentar contener el virus, aunque en el país se da por descontado que se alargará hasta mayo, tal y como ha recomendado Protección Civil.

Richeldi subrayó que la decisión de ampliar el aislamiento será del Gobierno, pero destacó que aunque los datos son alentadores no deben provocar una reducción de la atención y la prevención mantenidas hasta ahora.

Indicó que desde el 30 de marzo al 6 de abril, Italia contabiliza un 90 % menos de hospitalizados y también está reduciendo el número de personas que necesitan atención en las unidades de cuidados intensivos, lo que permite que los hospitales dejen de estar al límite de su capacidad, como han estado en las últimas semanas.

"La tendencia es menos marcada en el caso de los fallecidos (...), pero semanalmente la disminución es superior al 20 %", ha añadido.

Este neumólogo, que trabaja en el hospital Policlínico Agostino Gemelli de Roma, indicó que es fundamental seguir realizando controles y test a la población para conocer "cómo avanza la pandemia no solo a nivel nacional sino en cada región", porque esto permitirá desarrollar una estrategia que devuelva progresivamente la normalidad al país.

También fue preguntado por la necesidad de que todos los ciudadanos utilicen mascarillas, después de que la región de Lombardía haya decretado su obligatoriedad bajo multas de 400 euros para quienes no la respeten.

En su opinión, la mascarilla "da una falsa sensación de seguridad" a las personas que las usan y destacó que mantener una distancia de más de un metro con el resto de personas y lavarse continuamente las manos es "más eficaz".

"La mascarilla se debería utilizar en espacios en los que no se puede respetar la distancia, pero no creo que sea eficaz obligar de forma universal a todas las personas a llevarla", opinó.

Por su parte, el jefe de Protección Civil anunció que se ha establecido un fondo de ayudas para familiares de sanitarios fallecidos, que ha sido impulsado por el empresario italiano Diego Della Valle.