Un niño japonés de dos años, que desapareció el domingo durante un paseo con su abuelo, fue hallado indemne este miércoles, tras haber sobrevivido tres días aparentemente bebiendo agua del río mientras decenas de voluntarios los buscaban desesperadamente.

El pequeño había ido a pasear el domingo por la mañana con su hermano y su abuelo y su desaparición generó titulares en toda la prensa japonesa.

Fue un voluntario de 78 años, que llegó de una provincia vecina para participar en la masiva búsqueda del niño, quien lo escuchó este miércoles responder a sus llamados en el bosque.

"Grité Yo-chan (sufijo usado en Japón para los niños), y él respondió +sí, aquí+", relató Haruo Obata a las televisiones.

Yoshiki estaba sentado en una roca, con los pies descalzos.

"Al principio no pensé que fuera una figura humana", dijo Obata a la prensa. "Pero era él. Pensé que se me iba a parar el corazón".

El descubrimiento del pequeño Yoshiki Fujimoto en vida es milagroso, debido al húmedo calor que afectó a la región en los últimos días -llegando a 34 grados centígrados- y por la presencia de numerosos insectos.

Durante cerca de tres días, unos 160 policías buscaron al pequeño en la región, y se movilizaron drones con cámaras ópticas y térmicas, así como perros y helicópteros.

Sin embargo el niño fue encontrado a algunos centenares de metros del lugar donde se había perdido su rastro.