El presidente de Estados Unidos, Donald Trump ha ordenado este jueves a su Gobierno que inicie el proceso de reunificación de las familias de migrantes que han sido separadas a su llegada a la frontera con México.

Durante una reunión de Gabinete en la Casa Blanca, Trump ha pedido a los departamentos de Justicia, Seguridad Nacional y Sanidad y Asuntos Sociales "trabajar juntos para mantener a las familias de migrantes ilegales juntas durante el proceso migratorio y reunificar a las que ya han sido separadas".

Se trata de la primera orden para implementar el decreto ejecutivo firmado el miércoles por Trump para poner fin a la separación de los niños migrantes de sus padres, en respuesta a las críticas que esta medida ha generado en la comunidad internacional y también en Estados Unidos.

"Es la política de esta administración mantener la unidad familiar, incluyendo la detención de las familias de extranjeros juntos cuando sea apropiado y esté de acuerdo con la ley y con los recursos disponibles", señala el texto rubricado por Trump.

Trump ha defendido que, pese a estar separados de sus padres, los niños migrantes están "en las mejores instalaciones". "Si miramos atrás, en 2014, durante la Administración Obama, había fotografía que eran realmente malas", ha comparado.

Ha aprovechados además para arreciar sus críticas contra los demócratas por obstaculizar los dos proyectos de ley que hay en el Congreso sobre la reforma migratoria: "Quieren que tengamos el mejor hotel de lujo para todos pero no nos quieren dar dinero".

Tolerancia cero

El mandatario norteamericano aclaró al mismo tiempo que esto no supone derogar la política de Tolerancia Cero con la inmigración ilegal. Sin embargo, fuentes gubernamentales citadas por el 'Washington Post' han revelado este jueves que la Casa Blanca suspenderá los procesos judiciales contra los padres de niños migrantes.

Interrogada sobre este asunto por Reuters, la portavoz del Departamento de Justicia, Sarah Isgur Flores, se ha limitado a contestar que la información del diario estadounidense no es precisa. "No ha habido ningún cambio en la política de Tolerancia Cero de procesar a los adultos que cruzan ilegalmente nuestra frontera", ha dicho, sin referirse a quienes llegan acompañados de niños.

Trump, por su parte, ha ratificado que Estados Unidos debe tener una política fronteriza "fuerte". "Si no, tendremos a millones y millones de personas" intentando entrar en el país, ha augurado. "Lo que está pasando ahora será como un juego de niños. Será algo terrible", ha alertado.

Unos 2.000 menores de edad han sido separados de sus padres y encerrados en las últimas semanas por la política del Departamento de Seguridad Nacional de dividir a las familias en la frontera sur.