Las cataratas del Niágara podrían llegar a congelarse por completo si continúan las bajas temperaturas en Canadá, según aseguran los expertos. La última vez que se dio este fenómeno fue en enero de 2014.

Una ola de frío polar que comenzó el pasado miércoles, 27 de diciembre, azota las principales ciudades de Canadá, así como las del norte de Estados Unidos. En Toronto, por ejemplo, el frío ha roto un récord de 57 años, alcanzando temperaturas de hasta 22 grados bajo cero.

Gracias a la nieve y el hielo, las cataratas del Niágara ofrecen una imagen de película, que ha atraído a locales y turistas para tomarse fotos junto a este fenómeno natural.