Una mujer discutió con su marido y lo mandó a dormir al sofá. Por la mañana vio que había muerto. La discusión se originó cuando él, Mikey Murrell, llegó a su casa de trabajar y ella le reprochó el exceso de horas extras que hacía en el trabajo, iniciando una discusión que no se llegaría a solucionar. Más tarde, Ashley se enteraría que hacía más horas en el trabajo para regalarle un viaje a Praga por su aniversario, según informe el periódico británico Independent.

Este suceso ha cambiado la vida a Ashley que ha querido contar su historia para aconsejar a todas las familias a arreglar los problemas antes de ir a dormir

Un ahogamiento mientras dormía fue la causa de la muerte, según analizó la autopsia realizada.

Más adelante, la mujer inició una relación con su cuñado, que estuvo presente en toda la fase de duelo.

"Es extraño cómo de algo tan horrible, algo bueno puede suceder. Son muy felices juntos. Chris y Ashley han pasado por muchas cosas, pero realmente han estado allí el uno para el otro", cuenta un amigo de la familia para Independent.

"Me sentí tan culpable, estaba tan enojado conmigo misma por hacerle dormir en el sofá. Todavía me resulta difícil pensar que mis últimas palabras para él estaban llenas de ira", cuenta Ashley para el periódico británico The Sun.