La promesa del presidente de Francia, François Hollande, de declarar una guerra implacable contra el terrorismo mediante una única coalición contra el Estado Islámico (EI) comenzó ayer a tomar forma a través de intercambios diplomáticos entre París, Washington, Bruselas y Moscú. «Estamos comprometidos en aumentar nuestros esfuerzos en la lucha contra el terrorismo», declaró a los medios el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, tras reunirse durante una hora en el Palacio del Elíseo con Hollande y con su ministro de Exteriores, Laurent Fabius.

Según Kerry, Francia y EEUU pueden dar «pasos significativos» para mejorar la lucha antiterrorista, más allá de los bombardeos coordinados que ambos países ya lanzan contra el EI en Siria e Irak, y que se han intensificado tras los atentados yihadistas del viernes en París. Se espera que esas acciones se concreten el próximo día 24, cuando Hollande se reunirá en Washington con su colega estadounidense, Barack Obama, solo dos días antes de que el jefe del Estado francés se entreviste en Moscú con el ruso, Vladímir Putin.

Kerry avanzó que la intervención aérea contra el EI, que se ha acelerado en los últimos días, va a mantenerse a ese mismo ritmo elevado. «Avanzamos para meterles presión», dijo, al tiempo que precisó que uno de los objetivos son sus vías de suministro y el cese del contrabando de petróleo de la organización terrorista con países como Irak o Turquía, «una fuente importante de financiación».

Mientras tanto, en Bruselas, la jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini, señaló que los Veintiocho asistirán en ese combate a Francia, que había pedido activar la cláusula comunitaria para la defensa colectiva invocada en el Consejo de Ministros de Defensa de la UE por el ministro francés, Jean-Yves Le Drian. Se trata de la primera vez que Europa aplica el artículo 42.7 de los tratados comunitarios, que establece que los países de la Unión Europea (UE) «le deberán ayuda y asistencia con todos los medios a su alcance» a un Estado miembro atacado en su territorio.

Los Veintiocho respaldaron de forma «unánime» la petición de Francia de activar la cláusula comunitaria para la defensa colectiva por los atentados de París, y acordarán bilateralmente con ese país qué aportaciones pueden hacer a su acción contra el Estado Islámico o en operaciones internacionales. «Cada país ha dicho que va a ayudar y va a asistir, cada uno contribuirá de una manera o de otra», señaló el ministro de Defensa francés, Jean-Yves Le Drian.

Confió también en contar «muy pronto» con el apoyo de socios europeos, que podría concretarse en una «colaboración de capacidades en las intervenciones francesas en Siria o Irak, o por un alivio o apoyo a Francia en otras operaciones». «Francia no puede hacer todo», dijo Le Drian en referencia a la presencia militar en conflictos en África u Oriente Medio y a la respuesta al EI.

Apoyo de Irán y Catar

Esa gran coalición militar internacional que está forjando Francia busca también la implicación de otros países, como Irán o Catar. Hollande telefoneó hoy al presidente iraní, Hasan Rohaní, que debía haber visitado París el pasado lunes pero que suspendió el viaje por los atentados en la capital gala. Ambos mandatarios coincidieron en la necesidad «vital de luchar con todas las fuerzas» contra el EI y subrayaron «la importancia» de las negociaciones que se han llevado a cabo en Viena para buscar una solución al conflicto en Siria. También el primer ministro catarí, el jeque Abdullah bin Nasser bin Khalifa Al Thani, se entrevistó ayer con Hollande en la sede de la Presidencia francesa, tras la visita de Kerry y garantizó su «pleno apoyo» a la lucha antiterrorista a nivel militar, político, policial y financiero.