La Policía británica retirará el servicio de vigilancia "permanente" que mantenía junto a la Embajada de Ecuador en Londres, donde permanece refugiado desde hace más de tres años Julian Assange, y a cambio mantendrá un "plan encubierto" para, llegado el caso, arrestar al fundador de Wikileaks.

Scotland Yard ha anunciado en un comunicado que desde este lunes ya no habrá presencia policial visible junto a la Embajada, toda vez que no considera "proporcionado" seguir teniendo agentes de forma "permanente", 24 horas al día y siete días a la semana.

La Policía ha subrayado que no ha tomado esta decisión "a la ligera", sino que ha consultado con los ministerios del Interior y de Exteriores y ha considerado más necesario dedicar sus recursos "finitos" a otras actividades.

Wikileaks ha destacado en un mensaje de Twitter que el Gobierno ha dedicado a lo lardo de estos años alrededor de 12 millones de libras (más de 16 millones de euros) a vigilar a Assange, sobre quien pesa una orden europea de arresto por las investigaciones abiertas contra él en Suecia.

Scotland Yard ha recordado que la orden sigue vigente y que, por tanto, la operación para arrestarle "continúa". En caso de que Assange abandone la Embajada, ha añadido, las fuerzas de seguridad "harán todo lo posible para detenerle".

La Policía, que no prevé una resolución legal o diplomática "inminente" para el caso de Assange, ha explicado que reforzará un "plan encubierto" con el que poder detener al fundador de Wikileaks si finalmente sale de la Embajada.

El caso ha entrado en un punto muerto a pesar de que el pasado agosto prescribieron varias de las acusaciones contra Assange. La Fiscalía de Suecia mantiene abierta la posibilidad de interrogarle en Reino Unido, mientras Londres y Quito siguen cruzándose reproches sin solución a la vista.

Un portavoz del Ministerio de Exteriores británico ha confirmado la convocatoria este lunes del embajador de Ecuador, para expresarle "una vez más" la "profunda frustración" del Gobierno de David Cameron con la situación, según la agencia Reuters.

"Reino Unido ha sido completamente claro desde junio de 2012 al decir que tenemos la obligación legal de extraditar a Assange a Suecia. Esa obligación sigue vigente a día de hoy", ha apuntado este portavoz.