Entre los actos celebrados esta mañana se pudieron escuchar durante dos minutos sirenas que simulaban a las de los campos de concentración nazis. Los eventos comenzaron ayer y culminarán al atardecer de hoy. Las televisiones y radios han emitido durante toda la jornada documentales y películas históricas, así como entrevistas a supervivientes.

Uno de los actos tuvo lugar en el museo oficial a las víctimas del Holocausto, en Yad Vashem, donde el primer ministro israelí, Ehud Olmert, aprovechó para recordar que la próxima semana se celebrará el 59 aniversario de la instauración del Estado de Israel. "La renovación del pueblo judío, sacudiéndose las cenizas del Holocausto para construir una nueva vida en su histórico lugar de origen, es el pináculo de su victoria", valoró Olmert.

Los actos conmemorativos estuvieron marcados por el enfrentamiento entre Israel y El Vaticano, desencadenado por las críticas a la actuación del antiguo Papa Pío XII durante la II Guerra Mundial que figuran en un pie de foto del museo, en el que se puede leer que "incluso cuando las informaciones sobre los asesinatos de judíos llegaron al Vaticano, el Papa no protestó".

El enviado de la Iglesia católica a Israel explicó que boicotearía el acto de Olmert. Sin embargo, horas antes de que se produjera, monseñor Antonio Franco revocó la decisión por considerar que el boicot supondría un duro golpe a las débiles relaciones entre ambos.

Israel y El Vaticano iniciaron relaciones diplomáticas en 1993, después de cientos de años de tensas relaciones entre el catolicismo y el judaísmo. Aunque la relación entre ambos se ha normalizado en muchos aspectos en los últimos tiempos, quedan, no obstante, determinadas cuestiones por resolver, tales como la actuación de la Iglesia católica durante el Holocausto.