Dos ´carabinieri´ (policía militarizada) y una mujer resultaron heridos en un tiroteo registrado hoy ante la sede del Gobierno italiano, mientras Enrico Letta juraba su cargo como nuevo primer ministro en otro edificio. Esa ceremonia de juramento tenía lugar en la sede de la jefatura del Estado, conocida como palacio del Quirinal, y que se encuentra a cerca de medio kilómetro del lugar del incidente armado.

Según fuentes policiales, uno de los ´carabinieri´ resultó herido en el cuello y otro en la pierna, aunque no se teme por sus vidas, mientras que la mujer, que está embarazada, fue rozada por uno de los proyectiles.

El presunto responsable del ataque es Luigi Freiti, que se encuentra desempleado y que intentó suicidarse antes de ser reducido por la Policía, según el viceprimer ministro y ministro del Interior italiano, Angelino Alfano, que ha asegurado que el ataque se trata de un acto "aislado".

"Tras un primer examen de los hechos, se trata de un gesto aislado", declaró Alfano, quien se negó a relacionar el incidente con la crisis política en el país transalpino. "La situación general del país no es motivo de preocupación", aseguró.

El ministro informó de que Preiti intentó suicidarse tras realizar los disparos, pero su arma --una Beretta calibre 7.65--,se había quedado sin balas.

Con todo, Alfano ha ordenado que se refuercen los controles de seguridad en los objetivos considerados "de riesgo". Además, "el Consejo de Ministros ha expresado formalmente su más profunda solidaridad al Cuerpo de Carabineros y los familiares de las víctimas", según sus palabras, recogidas por los medios italianos.

El líder del grupo antisistema Movimiento Cinco Estrellas, Beppe Grillo, también ha condenado el suceso. "Quiero expresar mi plena solidaridad con las fuerzas del orden y esperamos que sea un episodio aislado", declaró en su blog.

Cinco disparos contra los 'carabinieri'

Según la primera reconstrucción de los hechos, el autor de los disparos se situó delante de la sede del Gobierno, que está en una zona céntrica de Roma muy concurrida, y sin mediar palabra disparó cinco veces contra los 'carabinieri', tras lo que intentó huir, aunque fue interceptado por las fuerzas del orden, que lograron detenerle.

En un primer momento se informó de que los ´carabinieri´ habían respondido a los disparos hiriendo al atacante, aunque posteriormente se señaló que éste resultó herido durante el forcejeo con los agentes de policía situados en el lugar y que lograron interceptarle.