El fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI), Luis Moreno Ocampo, anunció hoy que pedirá "cerca de la pena máxima", que es de 30 años de cárcel, contra el ex líder rebelde congolés Thomas Lubanga, declarado culpable de reclutar niños soldado en su país.

"Si pidiéramos un año por cada niño soldado superaríamos en muchos años la pena máxima de 30 años que contemplan las reglas de la Corte, pero buscaremos una pena cerca del máximo", afirmó Ocampo en una rueda de prensa.

La fiscalía tiene hasta el 18 de abril próximo para presentar ante los jueces su petición de pena contra Lubanga, quien ayer fue declarado culpable de reclutar y alistar en un conflicto armado a menores de 15 años entre 2002 y 2003 en la región de Ituri (este de la República Democrática del Congo).

El jurista argentino explicó que su oficina informará "uno por uno" a todos los testigos que han declarado en el juicio para explicarles la sentencia.

Tuvo palabras especiales para los niños soldado que declararon durante el juicio, ya que "arriesgaron sus vidas al dar testimonio, por lo que admiramos su coraje", destacó Ocampo.

Sobre la campaña de la ONG estadounidense Invisible Children, contra el líder rebelde ugandés Joseph Kony, también buscado por la CPI desde 2005 por reclutar niños soldado en Uganda, Ocampo dijo que esas iniciativas "ayudan a movilizar a la gente".

El fiscal hizo también un llamamiento para detener al máximo dirigente del Ejército de Liberación del Señor (LRA, por sus siglas en inglés): "Hay que parar a Kony", afirmó.

Ocampo también adelantó que tiene "pruebas suficientes" para presentar dos nuevos cargos, de asesinato y violación, contra Bosco Ntaganda, uno de los líderes de la milicia de la República Democrática del Congo acusado, como Lubanga, de enrolar a niños en la provincia de Ituri (este del país).

El fiscal instó a las autoridades congolesas a arrestar a Ntaganda, que "después de seis años desde que se pidió su orden de arresto sigue en libertad".