El Consejo de Seguridad de la ONU revisará hoy por primera vez la solicitud oficial de adhesión que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, presentó el viernes para que Palestina sea un estado de pleno derecho del organismo internacional.

El Consejo, que en septiembre está presidido por el embajador libanés Nawaf Salam, realizará a partir de las 19.00 GMT un primer análisis sobre esa demanda de adhesión a Naciones Unidas, pero no está obligado a responder en un plazo determinado y en realidad comienza así un proceso que se puede demorar semanas y hasta meses.

El presidente de la ANP presentó el 23 de septiembre su solicitud formal de adhesión a la ONU, que argumentó como un derecho propio y una opción de paz, mientras que ese mismo día el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, reclamó la reanudación inmediata de las negociaciones directas.

Para que la petición palestina sea aprobada por el Consejo, se requiere de una mayoría favorable de nueve de sus quince miembros y que ninguno de los cinco con derecho de veto (EEUU, Reino Unido, Francia, China y Rusia) no lo ejerzan, lo que ya se sabe que no ocurrirá porque el Gobierno de Washington ya ha advertido que vetará la propuesta.

A partir de hoy, el Consejo puede decidir posponer su consideración de la solicitud palestina o tramitarla, con lo que si este último fuera el caso, pasaría al comité de admisiones de nuevos miembros en donde están representados los quince integrantes de ese órgano.

El procedimiento indica que en ese comité la propuesta tiene que alcanzar el consenso para seguir adelante.

Si la petición palestina llega hasta ese punto, será sometida a voto. Si no alcanza el consenso, pues Estados Unidos ya ha anunciado que no está a favor, podría quedarse paralizada.

De llegar a ser afirmativo el voto, el Consejo de Seguridad tendría que decidir si recomienda o no a la Asamblea General que admita a Palestina como nuevo estado miembro, y es en este punto donde necesitará nueve votos afirmativos de los quince y ningún veto de los cinco permanentes, que no pueden votar en contra.

De nuevo en ese punto del proceso, los quince pueden darle luz verde y tramitar la petición a la Asamblea y someterla al voto de los 193 integrantes de la ONU, pero para obtener luz verde tiene que aunar una mayoría de dos tercios ó 129 votos.

En la actualidad hay 122 estados que han reconocido ya a Palestina.

Si el voto es negativo o se pospone, el Consejo tiene que someter un informe a la Asamblea, que determinará si envía o no de nuevo al Consejo esa solicitud para que se reconsidere.

Al mismo tiempo que se desarrolla ese proceso, el Cuarteto para la Paz en Oriente Medio (EEUU, Unión Europea, ONU y Rusia) prosigue sus negociaciones para lograr que las partes se sumen a la declaración aprobada el pasado viernes y que urgía a las partes para empezar esas negociaciones directas en un mes y alcanzar un acuerdo de paz definitivo en un año.

"En un mes habrá una reunión preparatoria entre las partes para fijar la agenda y el método de la negociación", sugirió el Cuarteto, que añadió que el objetivo es que "se comprometan a lograr un acuerdo no más allá del fin de 2012".

La solicitud de Abás señala que Palestina tendrá las fronteras previas al 4 de junio de 1967, lo que incluye Gaza, Cisjordania y Jerusalén este (en donde vive casi medio millón de colonos israelíes), lugar este último elegido como su capital.

Abás precisó el viernes que Palestina se establece en solo el 22 % de sus territorios históricos, sobre el total de los ocupados por Israel en 1967, cuando tuvo lugar la Guerra de los Seis Días y por la que Israel conquistó la península de Sinaí, Gaza, Cisjordania, Jerusalén este incluyendo la Ciudad Vieja y los Altos del Golán.

En la actualidad Palestina está reconocida únicamente como entidad permanente observadora ante la ONU, por lo que está invitada a participar como observadora en las sesiones y en los trabajos de la Asamblea General, a mantener una misión permanente y un embajador, que actualmente es Riyad Mansur.