La ofensiva de las fuerzas de seguridad sirias dejó este sábado entre ocho y doce muertos en la ciudad de Al Quseir, en la provincia de Homs (centro), según diferentes grupos opositores.

El activista de los Comités de Coordinación Local, Hozam Ibrahim, informó a Efe de que al menos ocho civiles fallecieron y varios resultaron heridos en Al Quseir en "una amplia campaña militar", mientras que el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos elevó esa cifra a doce.

Ibrahim explicó que durante la operación las fuerzas de seguridad incendiaron algunas viviendas de la localidad, que sufre la represión de las fuerzas del orden por tercera vez desde que comenzó la revuelta contra el presidente Bachar al Asad el pasado marzo.

Además, el activista indicó que algunos oficiales rechazaron disparar a los civiles, y que se desconoce si las autoridades tomaron represalias contra ellos.

En anteriores ocasiones, los grupos opositores han acusado al régimen de matar a los miembros de las fuerzas de seguridad que se niegan a cargar contra los civiles.

Por su parte, el Observatorio explicó en una breve nota que las doce víctimas se produjeron durante operaciones militares y de seguridad para detener a activistas.

A los fallecidos en Al Quseir se suma una víctima en la localidad de Duma, en los alrededores de Damasco, que fue identificada por ambos grupos.

La violencia se extendió también a Hama (centro), donde se desataron choques entre tropas desertoras y las fuerzas de seguridad, según los Comités, que no pudieron precisar si se habían registrado víctimas en estos enfrentamientos.

En cuanto a Hama, el Observatorio informó de que un joven de 28 años perdió la vida por los disparos recibidos cuando regresaba a su casa.

Estos sucesos se producen un día después de que al menos 13 personas fallecieran en distintos puntos de Siria durante una jornada de multitudinarias protestas contra el régimen de Al Asad.

Según las últimas cifras ofrecidas por la ONU, la represión en Siria ha causado al menos 2.700 muertos, de los que un centenar eran niños.