Muamar Gadafi, el dictador libio cuyo país se desangra por su enrocamiento en el poder, también es abuelo y ejerce como tal en un vídeo casero de algo más de seis minutos que acaba de ver la luz.

La grabación, que podría datar del año 2005, muestra el lado más hogareño del coronel. En el vídeo se le puede ver en chándal jugando y bromeando con sus nietos en su famosa jaima de Bab al-Aziziya, en Trípoli.

Gadafi charla y juega animadamente con dos de sus nietos, e incluso a la pequeña le da de comer. En algunos momentos de la grabación es el propio Gadafi el que empuña la cámara.