Una fuente de las fuerzas de seguridad francesas próxima a las investigaciones del atentado de Marrakech del pasado 28 de abril ha confirmado que los dos sospechosos detenidos el miércoles pertenecen al grupo insurgente Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).

Según el periódico francés 'Le Figaro', la fuente explicó que la bomba, que fue detonada por control remoto, llevaba la firma de AQMI. Además, uno de los detenidos ya habría estado en prisión y podría estar detrás de un ataque perpetrado hace tres semanas contra un famoso café en Tánger en el que murió un marroquí y un francés resultó herido.

Las identificaciones de los dos sospechosos habrían sido posibles gracias a los retratos robots elaborados a partir de las declaraciones de testigos, según la radio Europe 1.

El primero de los detenidos sería un hombre joven, de pelo corto y bien afeitado que se encontraba en la terraza del café Argana, el lugar del atentado, con dos bolsas grandes que podrían tener los explosivos antes de que se produjera la masacre. El segundo, es un hombre que se encontraba en las inmediaciones del establecimiento y que, según los testigos, estaba nervioso.