El disidente cubano Pablo Pacheco, quien llegó hoy a España en un grupo de siete presos liberados por el Gobierno, dijo a Efe en Madrid que aunque el presidente de Cuba, Raúl Castro, no es un "angelito" ha hecho "cosas que Fidel nunca hizo".

Pacheco, quien viajó a España junto con su esposa y su hijo, forma parte del grupo de 52 presos cubanos que el Gobierno de La Habana se comprometió a dejar en libertad antes de cuatro meses, de los que 11 han llegado o llegarán a Madrid esta semana con sus familiares, según autoridades españolas.

Pablo Pacheco, quien dijo que sufre hipertensión y gastritis entre otras dolencias, expresó su agradecimiento, en declaraciones a Efe, por el tratamiento del que han sido objeto él y todos los disidentes que han llegado a España, y afirmó que ahora quiere buscar un trabajo.

Cuestionado si han registrado cambios en Cuba, Pacheco declaró que "es una pregunta difícil, porque Raúl ha hecho cosas que Fidel nunca hizo, como liberar a los presos políticos y publicarlo en la prensa". Agregó que "no quiero decir que Raúl Castro sea un angelito, no, no, (pero) los cubanos ahora nos podemos hospedar (en hoteles). Raúl lo ha permitido".

El disidente cubano distinguió también el tratamiento que recibió en varias cárceles en su país, dado que a alguna llegó a bautizarla como "sepulcro de hombres vivos" mientras que en otras afirmó que fue respetado.

"Incluso llega el momento que los carceleros se dan cuenta de que nosotros no somos lo que dice la policía política", añadió. Sin embargo, manifestó: "no tengo nada que celebrar mientras haya un solo hermano en prisión, nada tengo que celebrar. Haré todo lo que pueda para la liberación de ellos".

Preguntado si para ser excarcelado han tenido que llegar a algún acuerdo con el Gobierno cubano, Pacheco dijo a Efe: "No, en ningún momento me han dicho que no puedo volver, incluso ha ocurrido algo que es increíble, al que sale se le quedan con todas sus propiedad, nosotros no".

Sobre la situación política interna, declaró: "el problema de Cuba lo debemos resolver los cubanos", al destacar que la Iglesia Católica "está jugando un papel muy importante".

Las excarcelaciones de disidentes presos lo consideró "un paso adelante para el futuro de Cuba. Ha llegado la hora de reconocer que la razón absoluta no la tiene nadie, en la diversidad de criterios está la razón". "Nosotros no somos delincuentes. El gran crimen de nosotros es amar a Cuba por encima de todo, incluso arriesgando la estabilidad de nuestra propia familia", subrayó el disidente cubano.