El periodista español David Segarra, que formaba parte de la denominada flotilla solidaria que fue asaltada el pasado lunes por Israel, relató en la madrugada de este jueves los instantes en los que los comandos de élite israelí abordaron el buque turco 'Mavi Marmara' y calificó de "desvergüenza absoluta" que el Gobierno hebreo acuse a los activistas de llevar armas a bordo del convoy humanitario.

Tanto Segarra como los otros dos españoles que integraban la denominada 'Flotilla de la Libertad' llegaron esta madrugada al aeropuerto internacional Atatürk, tras ser puestos en libertad por las autoridades de Israel.

Instantes antes de que se produjera el operativo militar israelí, "nos encontrábamos en la sala de prensa cuando en cierto momento todas las comunicaciones desaparecieron. Cayó Internet, cayeron la televisión, el satélite, los teléfonos... Ya nos imaginamos que era un acto de guerra electrónica de la Armada israelí", aseveró Segarra en una entrevista a la cadena Telesur, pocos minutos después de aterrizar en Estambul.

"En ese momento salimos con nuestras cámaras a ver qué estaba sucediendo en el exterior y nos encontramos con los comandos, que estaban en las lanchas rápidas, y vimos cómo se desplegaban hacia nosotros también con helicópteros", indicó el periodista, que se encontraba en el interior del barco turco para cubrir el transcurso de la expedición humanitaria para la cadena latinoamericana.

"Comenzaron los disparos indiscriminados con fuego real y con granadas de contusión y de sonido. Empezamos a ver cómo caían las primeras víctimas. Seguimos grabando y vimos cómo se producían cada más y más víctimas", agregó Segarra.

El Gobierno israelí ha asegurado que la actuación de sus militares y la muerte de al menos nueve activistas se debió a que éstos llevaban armas y munición a bordo, con las que habrían atacado a los soldados. "Es una falta de vergüenza absoluta realizar esas declaraciones cuando se mandan dos buques de guerra, submarinos, helicópteros y unidades de élite comandos contra personas desarmadas y civiles", denunció el periodista español. "Es una desvergüenza absoluta", reiteró.

"Lo único que se utilizó fueron palos de madera y cuchillos de cocina, elementos que se encuentran en cualquier barco del mundo, y eso no es capaz de enfrentar a una unidad de elite armada hasta los dientes y con todo el tipo de medios militares", aseguró.