Una de las primeras frases que pronunció Carmelo del Pozo una vez asumido su cargo de director deportivo del Hércules fue que iba a cambiar hasta el color de las paredes del vestuario. Y lo ha tomado casi al pie de la letra porque el club ha sufrido una honda renovación desde su llegada, al menos en el organigrama deportivo. Ningún empleado del curso pasado continuará esta temporada en su cargo. La gran mayoría queda desvinculada del club y algún otro quedará dentro de la estructura de la entidad en algún puesto todavía por determinar. Ésta ha sido la primera revolución de Del Pozo, pero no la única. La siguiente, de la que ya se van sabiendo nombres, es la deportiva, que también se antoja drástica.
La llegada de Carmelo del Pozo como director deportivo supone el cese de Ramírez, socio de Ortiz que asumió plenos poderes en enero tras la dimisión de un Portillo cuyo futuro en el club es todavía una incógnita. Ramírez se rodeó de Paquito Escudero y Paco Martínez para confeccionar la plantilla en enero y ahora en su lugar han llegado Ángel Becerra y Alejandro Varela, que trabajan sin descanso desde el mes de junio. Paco Martínez presentó su dimisión hace un mes y Paquito Escudero también ha dejado de pertenecer al Hércules pese a haber llegado en el pasado mercado invernal.
En el cuerpo técnico tampoco se ha librado nadie. El entrenador del Hércules hasta el parón era Antonio Moreno, que en teoría dirigirá al filial. David Cubillo, ex del Marbella, será quien le supla en el banquillo. A su lado tendrá como mano derecha a Alejandro Esteve, que realizó tareas de segundo técnico en el Dépor de Del Pozo y que dirigió a La Nucía hace varias temporadas. En el cargo de segundo entrenador ha estado en las últimas temporadas José Vegar, al que le queda un año de contrato, pero el club le busca una salida.
También será una cara nueva la del entrenador de porteros, ya que a Miguel Ausina, en el cargo desde 2017, le han enseñado la puerta de salida. En su lugar llega Chema Giménez, exportero de la entidad que se retiró esta misma temporada tras dos años como guardameta del Crevillente de Tercera División.
Portu, el preparador físico del club en los últimos cinco años, tampoco continuará y su sucesor será Alberto Berrocal, que ha coincidido esta última campaña con Cubillo en el Marbella. La revolución también ha llegado a la cantera y su director ya no será el exfutbolista José Antonio Palomino, que deja al filial en Tercera y al juvenil A en División de Honor. El encargado de controlar el fútbol base será Roberto Robles, con un gran currículum en A Coruña y Oviedo.
El cargo de delegado también se ha renovado y Quique Sala, en el puesto en toda esta interminable etapa en Segunda B, seguirá en el club en otras funciones. Quien le sustituye es Benito Marín, exdelegado del Alicante y del Intercity y con amplio recorrido en el mundo del fútbol.
Regreso al trabajo
El Hércules anunció ayer que el próximo miércoles saldrá del ERTE en el que está inmerso y que ese mismo día los futbolistas están citados para pasar los respectivos exámenes médicos. Tras ellos, el equipo comenzará la pretemporada de un proyecto remozado de pies a cabeza.
