La crisis también ha llegado al fútbol, más aún a Segunda División B, un reducto del semiprofesionalismo condenado a desaparecer el próximo año con la novedosa categoría Pro. Esas vacas flacas que se avecinan ya las conocen en el Hércules que, pese a que perfila un ambicioso proyecto deportivo para que no vuelva a ocurrir lo de este año, ya negocia a la baja con sus futbolistas.
Falcón, Raúl Ruiz y Diego Benito son los tres jugadores que terminaron contrato el pasado 30 de junio que el club quiere renovar. Pero no a cualquier precio. Los tres ya conocen la primera oferta del Hércules, una propuesta económica bastante más baja que lo que tenían firmado en su anterior contrato, alrededor de una rebaja del 50%. Las negociaciones todavía están verdes y los futbolistas esperan una contraoferta (económica y/o de duración) de un club alicantino que ya se vio obligado a recurrir al ERTE total el pasado mes de marzo.
Esta apretura económica en el mundo del fútbol ya se palpa en los más altos mercados y los clubes de primer nivel ya han abierto la posibilidad a nuevas negociaciones, como trueques o cesiones de varios años con obligatoriedad de compra aplazada. En lo que respecta al Hércules, los jugadores que tienen contrato saben que se espera de ellos la buena voluntad de reducirse el sueldo porque el club prevé una temporada dura económicamente. Por lo pronto, el Hércules desconoce cuándo y de qué manera podrán acceder los aficionados al estadio y, por tanto, también ignora la forma en la que diseñar una campaña de abonos que siempre ayuda a sufragar la temporada.
En lo que a la plantilla respecta, el Hércules tiene diez futbolistas con contrato: Nani, Felipe, Pablo Íñiguez, Yeray, Sergio Jiménez, Pedro Torres, Jesús Alfaro, Moha Traoré, Benja y Jona. Aun así, la idea de Ortiz y Juan Carlos Ramírez es la de continuar aligerando masa salarial. En este sentido, al menos uno de los dos delanteros (Benja y Jona) con toda seguridad no comenzará la próxima temporada en el Hércules. Además de los citados, cuatro canteranos que han alternado el primer equipo con el filial también tienen vinculación con el Hércules, como Abde (la perla del fútbol base) y Nico (operado de la rodilla en este curso). También está Víctor Olmedo, que se marchó cedido mediada la liga al Orihuela y el delantero Tarí, que no juega con el primer equipo blanquiazul desde abril de 2018 y que además dejará de ser sub'23 la próxima temporada.
Sin contrato
Los tres jugadores a los que el Hércules quiere volver a atar viven situación diferentes, aunque la idea de los tres es la de seguir en Alicante. Falcón está en Cádiz, donde ya se entrena en la playa, tal y como ha compartido en redes sociales. Raúl ha tenido que marcharse a Chipre, donde ya ha comenzado la pretemporada con el AEK Larnaca, el club que tiene sus derechos y que le cedió al Hércules en enero. El madrileño Diego Benito es el único que continúa en Alicante, donde reside con su familia.
Los tres esperan que mejore la oferta de un Hércules que, por boca de Ortiz, se ha propuesto profesionalizarse de una vez. Nunca es tarde. O eso dicen.
El «sí» de Carmelo se espera para esta semana
El director deportivo todavía no ha tomado una decisión en firme pero en el Hércules creen que está «muy cerca»
Es, sin duda, el culebrón más largo en la historia del Hércules. Una negociación eterna que ya va para cuatro meses y que todavía no tiene final. La propuesta del Hércules para que Carmelo asuma la dirección deportiva está cada vez más próxima. Tanto, que en el club aseguran que está «muy cerca» y confían que esta semana se cierre. La negociación ha pasado por diversas fases: desde un tanteo inicial en pleno confinamiento hasta el «no» a Ortiz. El mismo día, dicho sea de paso, Melgar también rechazaba la oferta a la desesperada del Hércules tras la negativa de Carmelo.
No obstante, aquel «no» no fue definitivo y la insistencia de Enrique Ortiz ha mantenido la llama. De hecho, el máximo accionista del Hércules contrató a Ángel Becerra y Alejandro Varela, hombres de la máxima confianza de Carmelo, para llevar la secretaría técnica del club. Un guiño a Carmelo, que todavía deshoja la margarita.
El club mantiene la calma, sigue bajo mínimos por la crisis del covid-19 y apela una vez más a la tranquilidad para confeccionar la plantilla y el cuerpo técnico de una temporada que comenzará mes y medio más tarde de lo habitual.
ERTE hasta el 30 de septiembre
El Hércules se aferró al Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y no saldrá de él hasta el 30 de septiembre. Eso sí, lo hará de manera gradual porque tiene previsto comenzar a entrenar el 17 de agosto.
