Segunda semana al frente e idéntico discurso. Antonio Moreno, entrenador interino del Hércules porque el club aún no le ha ratificado más allá del próximo partido, recalcó ayer que su única preocupación es que el equipo compita mañana (20.00) con garantías en la «complicada» visita al Barcelona B, puesto que su futuro no le importa más allá de ese encuentro. El técnico pacense recalca que «el camino» para intentar salir del pozo del descenso a Tercera División en las 13 «finales» que tiene el equipo por delante pasan por «la intensidad, el trabajo y la agresividad» que el Hércules mostró el pasado domingo ante el Llagostera, aunque no fue capaz de marcar en el Rico Pérez (0-0), otra asignatura pendiente para mañana en el Mini Estadi.
La prioridad, el equipo
El técnico se aísla del debate sobre su futuro en el banquillo
Antonio Moreno recalcó ayer que solo piensa en competir y sacar algo positivo en el partido de mañana en Barcelona ante el filial azulgrana y que lo último que le preocupa es su futuro o su continuidad en el banquillo blanquiazul. «Mi situación me da igual; lo que me importa es que el sábado mis jugadores compitan, trabajen en el campo y lo den todo porque ése es el camino», remarcó el técnico, que a comienzos de semana fue ratificado por el club como técnico tras empatar en casa el pasado domingo ante el Llagostera (0-0), pero con una considerable mejoría de la imagen y la actitud del equipo con respecto a partidos anteriores. «A partir de ahí, lo que tenga que ser, será; pero lo que quiero es que cuando termine el partido nos podamos mirar todos a los ojos. Lo demás me da igual, lo último que me preocupa soy yo», añadió el preparador, «muy contento» con la buena acogida que ha tenido en el vestuario blanquiazul y la respuesta de los jugadores.
Prueba de fuego
Discutir mañana la posesión al Barça B y ser «duros y rocosos»
El técnico extremeño no quiere mirar más allá del partido del Mini Estadi en la primera de las 13 «finales» que le quedan por delante al Hércules para evitar un catastrófico descenso a Tercera. El conjunto alicantino abre las posiciones de descenso como 17º clasificado con 22 puntos, a dos del «play-out» por la salvación y a cuatro de la permanencia directa. En todo caso, es consciente de que mañana le aguarda un partido «muy complicado» ante el filial blaugrana, uno de los equipos más en forma de la competición, cuarto clasificado con 44 puntos, el doble que los alicantinos. «El Barça B me preocupa por su buena dinámica; es un equipo que intenta llevar el control del partido a partir de la posesión del balón y tienes que estar concentrado los 90 minutos porque en cualquier situación te pueden generar una ocasión de gol», analizó. Para contrarrestar el potencial de los azulgranas, Moreno apuesta por «intentar tener el balón por momentos y las ideas muy claras; debemos ser un equipo duro, rocoso y un buen conjunto, muy competitivo».
Claves de la salvación
Confianza en la calidad de la plantilla y exigencia máxima de entrega, sacrificio y dedicación
El preparador blanquiazul subraya que «las armas» del Hércules para salir de su agónica situación pasan por la intensidad, el trabajo y la agresividad. «El recurso principal para salir de esta situación es competir y trabajar en el campo; sin eso, será muy difícil. Ser un equipo agresivo, unido a los buenos jugadores que tenemos, nos marca el camino a seguir», agregó. Además de la intensidad y la actitud demostradas ante el Llagostera y reconocidas por la hinchada del Rico Pérez, Moreno abogó por ir sumando otras virtudes colectivas como que su equipo «mantenga la portería a cero, ser capaces de marcar en la portería rival, ser más agresivos en ataque, finalizar las jugadas, dar continuidad al juego, ser valientes a la hora de rematar y acabar las acciones cuando llegamos a la banda».
«Palo y zanahoria»
Mimar a los jugadores para que ofrezcan su mejor rendimiento
Moreno reiteró que todos los integrantes de la plantilla deben sentirse «importantes y competir al 200% porque la exigencia es muy alta para todos». Para el partido del Mini Estadi será baja por sanción el defensa Álvaro Pérez, aunque recupera a los también zagueros Bruno Perone y Nani, dos teóricos que no jugaron el domingo ante el Llagostera por acumulación de tarjetas. El entrenador extremeño, que se declara partidario de consultar sus decisiones con los propios jugadores, cree que el ambiente y la presión mediática han podido afectar al rendimiento de los futbolistas del Hércules en esta temporada aciaga en el juego y los resultados. En sus dos escasas semanas al frente del equipo, Moreno aplica la técnica del «palo y la zanahoria»: exigencia máxima en el esfuerzo, pero también comprensión y cercanía con los jugadores, los únicos que pueden sacar al Hércules de su angustiosa situación: «Hay que mimarlos llevarlos en volandas, que estén contentos, que trabajen y tengan ilusión para competir, ayudarles a que estén en las mejores condiciones».
