Punto y final a una de las ventanas de invierno más convulsas de los últimos años en el Hércules. Con un día de antelación sobre el cierre oficial del mercado invernal, y salvo sorpresa de última hora, el club blanquiazul dio ayer por completada su plantilla profesional con los seis refuerzos y otras tantas salidas que se han formalizado durante el último mes, a las que hay que unir la marcha de otros dos jugadores sub-23: el canterano Víctor Olmedo al Orihuela y el colombiano Alvarado al Badalona, dos rivales directos del Hércules en su agónica lucha por la permanencia en la categoría de bronce.
En todo caso, el club blanquiazul se plantea la posibilidad de incorporar a algún jugador sub-23 antes de que este viernes se clausure la ventana invernal de fichajes, según confirmó ayer Francisco Escudero, Paquito, miembro de la comisión deportiva.
De este modo, el equipo de Vicente Mir tendrá que afrontar las 16 «finales» que quedan en esta segunda vuelta de la Liga para intentar evitar el descenso a Tercera División con los refuerzos de Raúl Ruiz y Perone en defensa; De Lerma y Sergio Jiménez en el centro del campo y Niko Vergos y Olavide en ataque, si bien estos dos últimos llegan con muy pocos partidos disputados en el último año y su puesta en forma aún requiere tiempo y trabajo.
En cuanto a la «operación salida», han dejado el Hércules en este período el defensa Rulo (rumbo al Cornellà), el mediocentro Fran Miranda (Nàstic de Tarragona), los extremos Borja Martínez (Ibiza) y Alejandro Alfaro (Intercity Sant Joan) y el delantero centro Carlos Martínez (Andorra). A estas bajas se unió por lesión de larga duración la del central Samuel Llorca, cuya vacante en el centro de la defensa tardó más de tres meses en cubrirse con la rocambolesca operación de permuta con el Nàstic de Perone por Fran Miranda.
En el apartado de bajas, la comisión deportiva blanquiazul también se planteó días atrás la posible marcha de Felipe Alfonso, pero ha cambiado de opinión y el lateral derecho seguirá en la disciplina blanquiazul. La variante que contempla el área técnica para reforzar el juego exterior de ataque pasa por adelantar la posición del carrilero alicantino Raúl Ruiz.
En los planes de Paquito y de su compañero de la comisión deportiva, Francisco Martínez, entraba la posibilidad de fichar a un séptimo jugador en ataque -preferentemente un extremo tras las salidas de Alejandro Alfaro y Borja Martínez- y a un lateral sub-23. Para esta última demarcación, el cuerpo técnico considera que Álvaro Pérez y Teo Quintero pueden desempeñarse también como laterales, aunque su posición natural sea la de central.
En medio de las urgencias del equipo y de la convulsión social e institucional que sacuden al club, el Hércules sondeó en las últimas horas el fichaje del delantero alicantino Raúl González, que milita en el Lleida, también del grupo III de Segunda B. Sin embargo, el futbolista de 29 años tiene un contrato aún vigente por una temporada y media y el club catalán exigía una compensación económica para permitirle volver al club blanquiazul, en el que ya debutó en Segunda A en la temporada 2012-13 con el actual presidente Quique Hernández en el banquillo.
«Se agradece que termine ya este mercado invernal porque es un mes complicado por las altas y bajas», reconoció ayer el capitán y portero Ismael Falcón al término del entrenamiento. «Y una vez cerrado, todos los que estamos debemos centrarnos en sacar al Hércules de esta situación; no hay más».
El equipo volvió a entrenarse ayer en el estadio Rico Pérez para preparar la visita del domingo (17.00) al líder Sabadell. La televisión autonómica À Punt ultima la retransmisión en directo del partido desde la Nova Creu Alta.
