A pesar de la desastrosa primera vuelta, la peor de la historia del club y que le tiene atrapado en los malolientes puestos de descenso a Tercera División, al Hércules le salen las cuentas de la permanencia. Al menos, no le parecen inalcanzables. Pero todo puede cambiar en cuestión de dos semanas. Por el momento, el conjunto blanquiazul está a cuatro puntos de la permanencia con toda la segunda vuelta por delante, que comenzará este próximo domingo (12 horas) en el Rico Pérez ante el Prat, que es penúltimo, un puesto por debajo del Hércules.
El promedio de las últimas 10 temporadas en el grupo III de Segunda División fija la permanencia en 44,5 puntos. El Hércules, que solo ha sumado 17 puntos en la primera vuelta, debería conseguir 28 puntos de aquí a final de Liga. Es decir, 11 más de los cosechados en la desastrosa primera mitad del curso, en la que el Hércules ha tenido cuatro entrenadores distintos y ha vulgarizado hasta el extremo unos colores que a punto estuvieron de regresar a Segunda División hace seis meses.
En realidad, los 28 puntos que ha de sumar el Hércules para conseguir la permanencia hipotética no es tarea inalcanzable para el conjunto blanquiazul. Más bien, una puntuación habitual en sus 16 temporadas en la división de bronce. De hecho, en 11 de ellas obtuvo esa marca y solo en cinco no llegó a conseguirla. La pasada temporada, en una dinámica totalmente opuesta, el conjunto de Planagumà sumó 35 puntos en la segunda mitad del curso y terminó segundo clasificado.
Sin embargo, la mejor segunda vuelta del club en toda su historia en Segunda División B la firmó, precisamente, Vicente Mir. El Hércules de la 15-16 consiguió 40 puntos en la segunda parte de la temporada y llegó a encadenar 16 partidos sin perder y siete victorias seguidas. Para ser exactos, Manolo Herrero, destituido en el mes de enero, contribuyó en pequeña medida porque con él en el banquillo se sumaron tres de esos 40 puntos, en la primera jornada de la segunda vuelta.
Cerca de esa 15-16, en la que el Hércules llegó a la final por el ascenso a Segunda, también se encuentran los 38 puntos de la 92-93, con Quique Hernández como técnico y con un Eduardo Rodríguez desatado como goleador. Entonces el equipo sí ascendió a la división de plata en una promoción en formato de liguilla.
La otra marca es también la del otro ascenso a Segunda, el último, el de la 04-05 con Juan Carlos Mandía en el banquillo. Aquella temporada el Hércules firmó 37 puntos en la segunda vuelta, terminó segundo -como el año pasado- y regresó a Segunda División en la última eliminatoria por el ascenso ante el Alcalá de Henares, entrenado por Josip Visnjic.
Registros negativos
Sin embargo, en dos de las últimas tres temporadas el Hércules no fue capaz de sumar esos 28 puntos que ahora se presumen vitales para la permanencia. En la 17-18 consiguió 22 y en la 16-17, 24. No obstante, las dos primeras vueltas de aquellas temproadas fueron netamente mejores que la actual y el equipo sumó 29 en la 17-18 y 33 en la 16-17.
La peor segunda vuelta de la historia del Hércules fue en la 89-90, en la que el equipo solo ganó dos partidos y obtuvo 15 puntos. En aquel curso atípico, el equipo no corrió riesgo de descenso a Tercera porque había sido líder durante 12 jornadas en una primera vuelta que terminó cuarto.
Ahora, en una situación de alerta roja, el Hércules recibirá este domingo al Prat, luego visitará al Villarreal B y cerrará el mes de enero en el Rico Pérez ante el Atlético Levante, que hoy está a siete puntos.
Quintero: «El punto del Ejea supo a poco»
El defensa Teo Quintero admitió ayer que el empate de la pasada jornada ante el Ejea «supo a poco» al Hércules, pero confió en hacerlo bueno ganando esta próxima jornada a El Prat, rival directo por la permanencia. El central lamentó los «errores puntuales» que impiden al Hércules sacar los partidos y agradeció a Mir la confianza.
