Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La crónica

Situación insostenible

El Hércules se instala en el caos con su tercera derrota en cuatro partidos y Planagumà queda al borde del despido tras un espantoso partido que solo cambió de cara con la entrada de Carlos

Gesto de rabia de Jesús Alfaro tras desperdiciar una clara ocasión de gol en la segunda parte. José Navarro

El Hércules ha tocado fondo. Nunca pensé que pudiera escribir esta frase a mediados de septiembre, pero el proyecto 19/20 nació muerto y parece que Lluís Planagumà no será quien lo vaya a levantar. Sería una sorpresa que el técnico barcelonés se sentara el domingo que viene de nuevo en el banquillo del Rico Pérez frente al Orihuela ya que la situación es insostenible. Encefalograma plano. Tres derrotas en cuatro partidos, un punto de 12 y otra semana más en puestos de descenso a Tercera. Intolerable. Y ayer quedó claro que el único problema de este Hércules no está en el remate.

Al cuadro de Planagumà le faltó casi todo ante el Sabadell. Por lo pronto comenzó el duelo sin el ímpetu necesario que le llevara a volcarse en el área rival como hacía la temporada pasada. Con jugadores como Yeray o Samuel a años luz de su nivel, el Hércules firmó un primer acto espantoso, con una avería muy seria en la sala de máquinas. Planagumà probó esta vez con el colombiano Alvarado como pareja de baile de Yeray, pero ambos fueron superados por el partido, el escenario y la angustia. Cuatro encuentros, cuatro mediocentros diferentes. Poco más que añadir.

El Sabadell salió mandón, sabedor de que los jugadores del Hércules podían ser un manojo de nervios y el Rico Pérez estaba de uñas. En los primeros tres minutos los catalanes tuvieron dos aproximaciones peligrosas y la grada perdió la paciencia. Los pitos no se hicieron esperar y algunos como Alvarado perdieron el norte definitivamente, jugando siempre hacia atrás, sin superar líneas ni transmitir agresividad. Pero con el paso de los minutos las fuerzas se equilibraron y el Sabadell ya no llegaba con tanta facilidad. Aún así el juego era anodino, sin ritmo ni verticalidad.

La aproximación más peligrosa del Hércules llegó en el 32' con un centro tenso de Borja Martínez que se paseó por toda el área pequeña sin que apareciera nadie para empujarlo. Desquiciante. Un minuto después, el delantero presionó al portero y el balón casi entró entre los tres palos tras rebotar en la espalda del ariete.

Pese a que el equipo pedía cambios a gritos, Planagumà decidió repetir con el mismo esquema y el inicio del segundo acto fue de terror. En el 46', Samuel se confió incomprensiblemente en un balón en el que tenía ventaja, Querol le ganó por velocidad y estuvo cerca de marcar en un disparo cruzado que buscó la escuadra. Apenas dos minutos después, con la grada ya de uñas por el error del central, llegó el 0-1 en un buena acción colectiva del Sabadell que culminó Querol con un centro desde la izquierda que remató el lateral Óscar Rubio llegando solo al segundo palo. El gol encendió aún más los ánimos y terminó por desquiciar a Samuel, que un minuto después volvió a fallar estrepitosamente, esta vez ante Aarón, y el error no costó el 0-2 por la buena intervención de Falcón.

Planagumà reaccionó en el 55' con la entrada de Diego Benito por un Alvarado superado y Jesús Alfaro tuvo el 1-1 en el 60' en un doble disparo. El primero dio en las manos del zaguero pero ni el árbitro ni el auxiliar lo vieron. El segundo salió rozando el palo. Esta doble ocasión pudo enchufar al Hércules al partido pero incomprensiblemente Nani vio la segunda amarilla un minuto después al dejar el codo en un salto en el centro del campo. Media hora por delante para la machada, pero este equipo no está para esas empresas, por mucho corazón que le ponga como sucedió en el tramo final.

El técnico blanquiazul no dio con la tecla hasta el minuto 70, cuando decidió dar entrada a Carlos Martínez, un futbolista diferencial que juega entre líneas, asiste a sus compañeros y oxigena el ataque. Y eso hizo nada más entrar. En el 75' abrió el balón a Jesús Alfaro dentro del área pero el disparo del extremo se marchó demasiado cruzado cuando tenía toda la portería para definir. Fue la ocasión más clara del partido para el Hércules. Pocos segundos después, el menor de los Alfaro sirvió un gran centro desde la derecha que se paseó por el corazón del área sin que Benja llegara a empujarla entre los centrales.

El arranque de coraje de los blanquiazules le llevó a encerrar al Sabadell en su área pese a tener un jugador más y eso es innegable. Tanto como que cuesta un mundo hacer un gol otra temporada más y esto desquicia ya al más optimista. En el 80' un córner muy cerrado de Borja lo remató el central Pajarero contra su portería pero el balón se marchó lamiendo el palo y dos minutos después Alejandro Alfaro remató a las nubes en posición inmejorable una asistencia de cabeza de Benja.

En pleno asedio a la desesperada, con el tanque Jona también en el campo, Borja perdió el balón y no tuvo piernas para enmendarlo, lo que provocó la contra del 0-2 ya en el descuento. Gritos de Planagumà dimisión, insultos al palco y mucha rabia al ver cómo la temporada empieza a descarrilar demasiado pronto. El técnico barcelonés podría ser despedido en las próximas horas o bien afrontar un ultimátum el domingo que viene en el Rico Pérez frente al Orihuela. El director deportivo Portillo tiene claro que la situación es insostenible y se necesita un cambio. Ahora está por ver que su suegro Enrique Ortiz y su socio Juan Carlos Ramírez piensen lo mismo, ya que fue precisamente la insistencia de ambos la clave para que Planagumà renovara el pasado mes de junio cuando la relación con Portillo ya estaba rota.

Sentido minuto de silencio por los fallecidos y damnificados por la gota fría en la Vega Baja

Sentido minuto de silencio por los fallecidos y damnificados por la gota fría en la Vega BajaEl Hércules decretó un minuto de silencio que se siguió respetuosamente desde la grada en memoria de los dos fallecidos en la Vega Baja con motivo de la gota fría, la más violenta en los últimos 140 años y que ha dejado también numerosos daños materiales. Al partido acudieron los dueños del Hércules Enrique Ortiz y Juan Carlos Ramírez, quienes se reunieron de urgencia al término del encuentro para valorar la continuidad de Planagumà al frente del equipo tras haber sumado únicamente un punto de 12 en este arranque de Liga.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats