Apenas diez minutos, quizás quince. El santuario de Begoña, destino de peregrinación obligada para todos los bilbaínos, se tiñó de blanquiazul el pasado sábado en un arranque de improvisación que terminó con un presagio mágico.

El exfutbolista de Hércules y Athletic Joseba Betzuen y Josean García, fundador del Consociatio, la peña herculana sita en Bilbao, fueron los cicerones de la expedición de INFORMACIÓN que se desplazó a tierras vascas para cubrir el partido en Barakaldo.

El sábado, alrededor de las nueve de la noche, en la previa del inicio del «play-off» rumbo a Segunda División, Betzuen sugirió un plan improvisado. «He pensado que debemos ir a Begoña a pedirle el ascenso del Hércules, si en Alicante se va a la Santa Faz, aquí se le pide a la 'Amatxu'».

Cámara en mano y camiseta al hombro, la misma que el club, a manos de Javier Portillo, le había entregado al Consociatio en el hotel por su incondicional amor por el Hércules en la distancia, Josean y Betzuen irrumpen en la basílica. Salida masiva de los fieles tras la última misa del día. El foco de la cámara se enciende y una voz cálida desliza que no se grabe. Es el párroco de Begoña, José Luis Achótegui.

Es entonces la hora de Betzuen, representante del Hércules en una ofrenda inusual. Apenas tres palabras bastan para seducir al cuidador del santuario. La iglesia se vacía y en un abrir y cerrar de ojos la camiseta del Hércules descansa sobre el altar. La ha puesto Achótegui.

Betzuen y Josean encabezan la petición al párroco como agentes dobles: bilbaínos y herculanos. «El Hércules visita todos los años a la Santa Faz y le pide el ascenso, por eso hemos aprovechado que está el equipo en Bilbao para pedírselo también a la 'Amatxu'», explica Josean.

«Pues anda algo ocupada, lo que hay que hacer es chutar bien», sale al paso Achótegui con humor. «Ella siempre ayuda, pero hay que dejarse ayudar también», prosigue el responsable de la basílica. «Que saquen lo mejor que tienen y seguro que Begoña ayuda», termina el párroco. Algo así como 'a Dios rogando y con el mazo dando'.

El Hércules, que ya había visitado a la Santa Faz el pasado 29 de abril, regresó de Barakaldo con otra bendición, la que quizás ayudó a que el disparo de Benja tropezara en un defensa y se colara sin remedio en la portería de los locales en la ida de la primera eliminatoria por el ascenso a Segunda.

Tras el empate en Lasesarre, el técnico del Hércules, Lluís Planagumà, amigo de las supersticiones a las que llama «hábitos», fue preguntado por si el equipo al completo visitaría la basílica en caso de ascenso en algún viaje cercano de la próxima temporada. «Me comprometo a hacerlo incluso si pasamos esta eliminatoria, no miro más allá», llegó a decir.

21.15. «Venga, que aquí no damos de cenar». Es una mujer la que apremia a salir del santuario a Betzuen, Josean y a los integrantes de INFORMACIÓN. Un portón de madera separa la iglesia de una plaza que reposa bajo el monte Artxanda.

Achótegui se despide de la expedición alicantina con la mejor de las bendiciones y Betzuen promete volver con los deseos cumplidos. Hasta ahí, todo quedó grabado por la cámara de INFORMACIÓN TV.

Entonces la sacristana abrió el portón. Con la hoja aún entreabierta, una décima de segundo después, se cuela entre la rendija una pelota de un partidito callejero y cae en las manos de la expedición. «¡Milagro! ¡Genuflexión!», grita Josean. Fue una de las señales de un viaje lleno de buenos augurios.