La Conselleria de Deportes considera que el Valencia cometió discriminación contra los aficionados alicantinos desplazados el pasado 14 de octubre a la Ciudad Deportiva de Paterna y propone una sanción para el club che.

El Ejecutivo autonómico entiende que el Valencia actuó de forma deliberada al no vender entradas a los seguidores del Hércules en su visita al filial che y ahora presenta una resolución sancionadora, firmada por el instructor del expediente, a la que la entidad de Mestalla podrá presentar alegaciones en un plazo de 15 días desde que reciba la notificación.

Una vez recibidas las explicaciones, el Consell las estudiará y comunicará, en un tiempo todavía por determinar, una resolución definitiva firmada por el director general de Deportes de la Generalitat, Josep Miquel Moya Torres.

La sanción ahora propuesta por Deportes no es alta y oscilará entre 600 y 30.000 euros, una cuantía sobradamente asumible para un club de la dimensión del Valencia. Fuentes de la Generalitat admitieron que la multa puede quedarse en una cantidad simbólica.

El veto a los alicantinos, a los que se le negó el acceso al recinto tras pedirles el DNI, fue denunciado en su día por el Hércules ante la Generalitat, la Federación Español de Fútbol y el Síndic de Greuges y el Consell ya vio entonces un comportamiento «inadmisible» por parte del Valencia.

De hecho, y en una primera instancia, el Valencia formuló alegaciones al expediente instructor en el sentido de responsabilizar al Hércules por no haber informado bien a sus aficionados de que se restringiría el acceso al campo Antonio Puchades de Paterna.

Asimismo, el club de Mestalla recalcó que decidió no vender entradas por motivos de seguridad. Sin embargo, estas alegaciones iniciales del Valencia fueron rechazadas por el instructor del expediente sancionador, que en su última propuesta de resolución plantea una multa a la entidad che.

El veto a la afición alicantina por parte del Valencia llegó al conseller de Deportes, Vicent Marzà, que reprobó la conducta del Valencia: «Es inaceptable marginar a alguien por su lugar de nacimiento». Además José Antonio Terol y Miguel Navarro, dos aficionados del Hércules que sufrieron la prohibición en el estadio Antonio Puchades, elevaron el suceso a Fiscalía por un presunto delito de odio y el Ministerio público comunicó en noviembre que había admitido a trámite la denuncia. También Antiviolencia mantiene abierto un expediente informativo de los hechos.

La multa de la Generalitat Valenciana supone una cantidad simbólica. El Valencia CF tiene ahora un periodo para alegar ante el Consell y en último término podría recurrir a la vía ordinaria. O bien aceptar la sanción y pagarla ya.

El contencioso del Mestalla-Hércules enrareció las relaciones entre el Hércules y el Valencia. «No explican por qué vetaron a los alicantinos y están desviando la atención», expresó en su momento el club blanquiazul tras conocer las explicaciones sobre el veto que ofreció la entidad de Mestalla. «Es rotundamente falso que el problema fuera causado por la afición del Hércules porque afectó a todos los empadronados en la provincia de Alicante», puntualizó el Hércules.