El central del Hércules Pablo Íñiguez afirmó este miércoles que para el equipo alicantino ganar fuera de casa se ha convertido en una asignatura pendiente tras acumular cinco desplazamientos consecutivos sin lograr la victoria.

El conjunto alicantino visita este domingo (12.00) al filial del Espanyol con la moral reforzada tras remontar el pasado domingo en el Rico Pérez al líder Villarreal B (2-1) y retomar todas las opciones en la lucha por el ascenso a Segunda A.

"No habíamos remontado y ya lo hemos conseguido, ahora toca volver a ganar fuera; es una asignatura pendiente", destacó Íñiguez sobre la racha de tres meses que lleva el equipo sin ganar desde que lo hiciera en Lleida (0-1) el pasado 27 de octubre en la jornada 10.

El defensa admitió que el equipo afronta el próximo partido "contento y con tranquilidad" tras haber roto su mala racha de resultados ante el filial del Villarreal, líder, con un resultado que considera debe "aportar confianza".

"No estábamos al mejor nivel y hay que recuperarlo", señaló Íñiguez, cuyo equipo se desplomó del liderato a la sexta plaza en dos meses.

"Hemos recortado distancias y estamos otra vez en la pelea y sin descartar nada", indicó el central en referencia a la lucha por la primera plaza que ocupa el Villarreal B con seis puntos de ventaja sobre los blanquiazules.

El futbolista confió en darle "continuidad" al resultado ante el Espanyol B, un rival del que comentó que ya complicó mucho la vida al Hércules en la primera vuelta de la competición.

"Tuvieron mucho el balón y nosotros aprovechamos nuestra ocasión. Espero un partido parecido, pero espero que podamos hacerles daño con el balón porque podemos", afirmó el valenciano, quien pidió "ser valientes y confiar en nuestras armas".

Por último, el jugador, cedido por el Reus, se refirió a la situación de su equipo, al borde de ser apeado de la competición, aunque admitió que solo tiene la mente puesta en el Hércules.

"Ya veremos qué pasa, porque no he cobrado la parte de mi ficha que me pagan ellos", dijo el jugador, quien confesó que tiene una llamada pendiente a AFE para conocer su situación.

Íñiguez dijo estar contento en Alicante y en el Hércules, club al que indicó que "no le puedo pedir más". "Es un club con un potencial tremendo en cuanto a afición y estadio. Conseguir aquí un ascenso sería un salto tremendo para todos y es lo que tengo en la cabeza", concluyó.