Paco Candela, centrocampista del Hércules, afirmó ayer que su equipo debe intentar controlar el juego en el encuentro de la próxima jornada ante el Cornellá, ya que señaló que no les beneficia un partido de ida y vuelta. «A pesar de jugar en un campo pequeño, ellos quieren jugar. Es un Cornellá que quiere combinar más. Habrá que tener el balón y que no sea partido de ida y vuelta porque ellos ganarían en esas circunstancias», explicó el alicantino.

Candela aseguró que la plantilla del Hércules ha encajado con «naturalidad» la primera derrota del curso ante el Teruel (0-2), ya que era consciente de que «no íbamos a ganar todos los partidos de Liga». «Seguimos con ilusión fuertes», insistió el jugador, quien precisó que el Hércules fue a perder «el partido menos indicado porque fue en el que menos lo merecimos» debido a las numerosas ocasiones de gol generadas.

El centrocampista, que salió del equipo por una lesión en la rodilla, afirmó estar completamente recuperado y con ilusión por recuperar su puesto en la alineación, si bien se mostró tranquilo por el buen nivel mostrado por los otros centrocampistas de la plantilla, en especial por Fran Miranda, con quien pelea por la titularidad en la posición de 'stopper'. «La competencia es buena y los compañeros que han salido lo han hecho perfecto», comentó Candela, quien no se ve incompatible con Fran Miranda, el otro medio centro defensivo de la plantilla.

«Nos podemos adaptar el uno al otro y le puede venir bien al equipo un doble pivote fuerte», señaló el alicantino, quien no se sintió intimidado por la presencia de un jugador como el portugués Manucho en la delantera del Cornellá. «Prefiero que jueguen siempre los mejores. Es un poco extraño que esté jugando en Segunda, pero el Hércules también tiene exjugadores de Primera. Es un gran futbolista y habrá que echarle un ojo», concluyó el pivote crevillentino, que llegó al Hércules en el pasado mercado de invierno procedente del Fuenlabrada.