Fin del rodaje con sobresalto. El Hércules culminó ayer una eterna pretemporada con susto incluido. El partidillo contra el filial que acogió el Rico Pérez pasadas las diez de la mañana se interrumpió con la retirada a vestuarios del delantero camerunés Emaná, con la mano sobre la parte trasera de su pierna derecha, tras unos veinte minutos sobre el césped. El propio jugador, al término del encuentro, confirmaba que había decidido retirarse por precaución porque había notado algo en el isquiotibial. «Nada grave», trataba de explicar, a falta de las pruebas a las que será sometido.

El último ensayo del verano para la plantilla de Lluís Planagumà lo presenciaron unas 300 personas que cambiaron la playa por la grada. El mayor aliciente de la sesión fue el debut del último fichaje del club, el lateral Adrián Jiménez, que precisamente sustituyó a Emaná para disputar los últimos 20 minutos de la sesión. En su puesto primero jugó el canterano Olmedo, a pierna cambiada, y en la segunda parte lo hizo Nani, titular indiscutible durante toda la pretemporada.

Planagumà salió con un once plagado de probaturas: a la mencionada inclusión de Olmedo se unió la presencia de Salinas en un extremo o la del delantero Carlos Fernández como «9». El lógico dominio de los mayores hizo que el filial de Antonio Moreno pasara la primera media hora entre despejes y mucha concentración, pero el gol del primer equipo no llegó. Carlos Martínez primero y Chechu después sirvieron dos buenos balones aéreos a un Carlos Fernández que no llegó a cabecear. La ocasión más clara la tuvo Carlos Martínez, goleador hace unos días ante el Murcia en el Ciudad de Alicante, pero su disparo se marchó alto.

El ariete barcelonés fue el único que levantó algún «olé» entre la grada con un par de quiebros invisibles. Necesita socios y el equipo, un rival de mayor entidad para ser medido como debe. Ya no tendrá más rivales hasta el próximo domingo, cuando recibirá al Ontinyent en el primer partido de Liga. Tras el parón para beber agua, el primer equipo, contagiado por la trivialidad del choque, cedió el testigo del juego a un filial que resultó un más que digno esparrin. Paredes, que ha hecho la pretemporada con el primer equipo, y Juanpe pusieron en evidencia al centro del campo de Planagumà y el ariete Piera pudo establecer el 0-1 en una ocasión en la que cruzó en exceso el balón.

Tras el descanso, tanto Planagumà como Moreno introdujeron cambios y las fuerzas volvieron a igualarse. El camerunés Emaná tuvo en sus botas la ocasión más clara del partido, pero se enredó y no acertó a introducir la pelota en la red, pese a que el portero ya estaba batido. Un meta, Pablo, que ha hecho la pretemporada con los mayores y que incluso debutó en el amistoso de Orihuela, que se erigió como héroe de los suyos tras frenar con éxito un buen mano a mano con José Fran.

El gol llegó mediada la reanudación con un tiro desde la frontal de Pol Roigé con la zurda tras un pase atrás de Olmedo. La ventaja pudo aumentar con un cabezazo que atinó Carlos Fernández, pero que se marchó desviado. Sin embargo, el filial dio un último susto tras un bonito caracoleo y un disparo de Adde.

Juli no se viste

El único que no se vistió fue nuevamente Juli, que sigue arrastrando unas molestias musculares que ya le impidieron jugar el pasado miércoles ante el Real Murcia. El club espera poder contar con él para el debut liguero contra el Ontinyent del próximo domingo. Tampoco tuvieron minutos los canteranos Tarí y Pedja, en dinámica del primer equipo desde el año pasado, porque también afrontan la recta final de la recuperación de sus respectivas lesiones. Ambos no estarán aún disponibles.