Se terminó la espera. El Hércules de Planagumà cerró esta mañana el plan de sesiones de una eterna pretemporada con un partido de entrenamiento en el Rico Pérez contra el filial que dirige Antonio Moreno. El primer equipo encontró más que un digno esparrin y sólo pudo meterle mano al B falta de 20 minutos con un gol del extremo Pol Roigé.

El Hércules salió con Ferri en portería; Juanjo, Samuel, Pol, Olmedo en la defensa, Alvarado y Benito en la medular; Chechu y Salinas en los costados y con los dos Carlos arriba. Tras el descanso llegó el carrusel de cambios y hasta se estrenó el último fichaje del club, el lateral zurdo Adrián Jiménez, que gozó de una veintena de minutos. Ante 400 espectadores, el primer equipo lo intentó con un Chechu insistente y un Carlos Martínez que siguió protagonizando los "olés" de la grada.

El filial aguantó el tipo los noventa minutos con su portero Pablo, que debutó en Orihuela con los mayores, muy inspirado y con Juanpe y Paredes pidiendo oportunidades. En el palco presenciaron el partidillo el presidente del club, Quique Hernández, y el director deportivo, Javier Portillo.