P ¿Cómo ha encajado la llamada de Portillo para comunicarle que no seguiría en el Hércules?

R Cuando encadenas dos años sin jugar la promoción, sabes que habrá cambios. Y en la prensa ya se dejaba caer algo, por lo que no pilló de sorpresa, sabía que podía llegar. Las despedidas son tristes y más si son del club de tu ciudad después de cuatro años y muchas situaciones vividas, pero me voy contento y orgulloso de haber formado parte de esta gran familia.

P Al final se marcha con una media de 35,5 partidos por temporada con ocho entrenadores diferentes...

R Ahí están los números, no lo habré hecho del todo mal... Es difícil tener esa regularidad cuatro temporadas en un equipo con la exigencia del Hércules al que cada año llegan jugadores nuevos y de calidad contrastada. Me quedo con lo bueno y he disfrutado en el Rico Pérez.

P Que el Hércules haya tenido ocho entrenadores en cuatro temporadas tal vez sea un indicativo de que algo no se hace bien...

R Puff, no sé que contestar porque esas decisiones no son de los jugadores. Por ejemplo, los dos primeros años se cambió de entrenador (Herrero por Pacheta primero y Mir por Herrero después) y nos quedamos a las puertas del ascenso. Cuando en un club con tantas urgencias y presión como el Hércules las cosas empiezan a ir mal, siempre hay cambios.

P Habla de urgencias y presión, pero al Rico Pérez van 5.000 personas cada domingo y la mayoría aplaude cuando su equipo da dos pases seguidos...

R La presión está ahí y los entrenadores y los jugadores lo saben, el objetivo es ser líder desde el principio y a poco que se den dos resultados malos ya empiezan los nervios, yo he sufrido en mis carnes que el Rico Pérez empiece a pitar al equipo en el minuto 1 en una mala racha. He echado en falta tranquilidad cuando las cosas no han salido bien. Anteriormente en el club las cosas se hicieron muy mal, por eso estamos en Segunda B, y a veces parece que seamos nosotros los que pagamos eso. Ojalá las cosas se hagan de otra manera este año, haya tranquilidad, el Hércules arranque bien y pueda conseguir su objetivo aunque yo ya no esté.

P La grada del Rico Pérez le ha mirado siempre con lupa, tal vez por ser de la tierra o por pedir siempre el balón y asumir riesgos. ¿Se siente injustamente tratado?

R Mi manera de jugar es esa, si no pidiera siempre el balón e intentará sacarlo jugado, no sería yo. Jugar así me ha llevado hasta el Hércules. Pero no me siento mal tratado, creo que conmigo ha habido división de opiniones y las críticas constructivas las he encajado siempre bien. También tengo claro que no se puede gustar a todo el mundo. Insisto en que me voy del Hércules orgulloso.

P ¿El mejor recuerdo de estas cuatro temporadas?

R Los dos primeros años fueron muy bonitos porque jugamos la promoción, pasamos rondas y nos quedamos a las puertas del ascenso. Pero también fue importante jugar en el Nou Camp contra el Barcelona. Pero por encima de todo te quedas con las relaciones personales y los amigos que has hecho en el vestuario.

P ¿Y el peor recuerdo?

R El arbitraje de Cádiz de la primera promoción no se olvidará nunca, pero me duele más lo que ha pasado estas dos últimas temporadas en las que ni hemos jugado la promoción.

P ¿Con qué entrenador se queda?

R He tenido mucha suerte porque todos me han respetado y al final he jugado bastante. A Vicente (Mir) le estoy agradecido porque me llama allá donde va y con Manolo Herrero también disfruté mucho. Con Josip (Visnjic) descubrí una persona espectacular y un pedazo de entrenador.

P El fútbol a veces tiene giros inesperados y uno de ellos es que el Elche esté a un paso del ascenso con Pacheta de entrenador y Javi Flores como titular...

R Esto es lo bonito del fútbol, que para gustos están los colores. Aquí pensaron que no eran válidos y eso no significa que sean malos profesionales o poco capacitados. Otro caso parecido es el de José Gaspar, que está también cerca de subir con el Cartagena y se fue de aquí en enero.

P Por no hablar de Yeray o Gallar...

R Yo creo que todo el mundo tiene que hacer autocrítica y ver por qué pasan estas cosas. El caso de estos dos se veía venir, tenían buenas condiciones e iban a explotar, aquí o en otro sitio.

P Echando un vistazo a su currículo, el Hércules también relanzó su carrera ya que jugaba en Bielorrusia...

R Siempre digo que a mí me costó mucho llegar al Hércules, tuve que hacer muchos esfuerzos. Por ejemplo ir a Bielorrusia no fue fácil. Jugar en el equipo de mi tierra siempre fue un objetivo y cuando llegué no pensé en jugar tantas temporadas, así que me voy satisfecho.

P ¿Tiene ya claro qué camiseta vestirá la temporada que viene?

R No, es cierto que me ha llamado Vicente (Mir) para ir al Alcoyano como también hizo el pasado verano para llevarme al Elche. Y le agradezco el cariño y la confianza. También hay más cosas. Ahora quiero tomarme unos días de descanso antes de tomar una decisión con los míos.

P ¿Le apena que su amigo Paco Peña no haya podido jugar un año más como él quería?

R Por todo lo que ha hecho en el Hércules, merecía retirarse cuando él quisiera. Es una persona espectacular, un amigo. Seguro que le irá bien en lo que haga.