El Hércules CF ha contado desde su último descenso a Segunda B, del que se cumplieron recientemente cuatro años, con tres presidentes, dos directores deportivos y siete entrenadores en las cuatro temporadas que ha militado en la categoría de bronce del fútbol español. Las urgencias deportivas y económicas han condicionado el día a día de la entidad alicantina, en la que apenas ha habido estabilidad más allá de las dos primeras temporadas en la categoría.

Los cambios más llamativos han tenido lugar en el banquillo, donde ningún entrenador ha logrado comenzar y acabar una temporada, ya que en la presidencia, pese a las variaciones, se mantiene siempre la línea marcada por Enrique Ortiz, máximo accionista individual.

El Hércules arrancó su tercera etapa en Segunda B con Carlos Parodi en la presidencia, quien el pasado año cedió su puesto a Juan Carlos Ramírez, quien ya se encontraba en el núcleo de poder de la entidad como socio colaborador. Ramírez, que mantuvo frentes abiertos con Hacienda y el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), apeló a motivos profesionales para ceder el cargo a Quique Hernández, el entrenador con más partidos en la entidad y el técnico del último descenso.

La dirección deportiva tampoco ha sido ajena a los cambios de rumbo. Comenzó Dani Barroso, quien en las tres temporadas que estuvo al frente del equipo logró clasificarlo para dos fases de ascenso.

Javier Portillo, que fue su colaborador en la última temporada, tomó el mando en la pasada, en la que el equipo cuajó una de sus peores campañas al no disputar ni la promoción ni clasificarse para la Copa del Rey.