El nuevo Hércules que entrenará Lluís Planagumà es hoy en día toda una incógnita, pero el director deportivo Javier Portillo sí tiene claro que el central Samuel Llorca y el portero Ismael Falcón formarán parte del equipo. Ambos fueron apuestas muy fuertes del club el pasado verano y su llegada generó expectación e ilusión en la afición. De hecho, sus presentaciones convocaron a decenas de aficionados en el Rico Pérez, algo nunca visto en Segunda B. Pero el rendimiento de ambos, y de la mayoría de compañeros, ha sido muy decepcionante, con más sombras que luces.

Pese a algunos errores que costaron puntos, Falcón, de 34 años, fue titular indiscutible en Liga para Gustavo Siviero, Claudio Barragán y Josip Visnjic, y también jugó el partido decisivo de Copa frente al Elche. Al igual que Samuel, firmó hasta 2019 y el curso que viene continuará, muy probablemente además con el rol de titular. El canterano Iván Buigues hará las maletas para buscarse un futuro lejos de Alicante y Portillo debe incorporar a otro meta sub'23, ya que parece poco probable que gaste una ficha sénior en otro portero.

Por otra parte, Samuel Llorca, de 33 años, también jugó casi siempre que estuvo disponible (34 partidos) y únicamente Siviero le sentó en en el banquillo en su último partido frente al Peralada. El Hércules ganó 3-2, el argentino fue despedido y el meritorio Adrià Vilanova cumplió con creces en su debut y hasta anotó un gol. Pero no le sirvió para seguir en el once, ya que llegó Claudio Barragán y se propuso recuperar la mejor versión de un Samuel que empezó el curso con muchas dudas. Su rendimiento fue claramente de menos a más y acabó la campaña ofreciendo más agresividad y seguridad, aunque con las mismas imprecisiones en la salida de balón. Portillo sigue creyendo en Samuel aunque también llegará un central de nivel que debe complementarse con el alicantino y también con un Pol Bueso que negocia su renovación desde hace varias semanas. Adrià Vilanova, cuarto zaguero en discordia y que acaba contrato, seguramente hará también las maletas ante la flagrante falta de oportunidades.

El director deportivo, por último, sigue sin poder cerrar operaciones que ya tiene avanzadas porque Enrique Ortiz y Juan Carlos Ramírez insisten en que antes hay que llegar a un acuerdo con Hacienda (deuda de 4 millones) o con el Instituto Valenciano de Finanazas para financiar la posible sanción de 7 millones a la que habrá que hacer frente si finalmente no prospera el recurso de casación presentado ante el TJUE.

Peña y Portillo

El ya exjugador Paco Peña acudió anoche al pabellón Pedro Ferrándiz, donde el HLA Alicante jugaba ante el Canoe, junto a Portillo, su amigo y a partir de ahora compañero de despacho. El excapitán, que cuelga las botas con más de 600 partido a sus espaldas (316 de ellos con el Hércules), se ha formado como director deportivo y entrenador y reconoce que le gustaría estar lo más cerca posible del césped.