Los abogados de Javier Portillo y Juan Carlos Ramírez, director deportivo del Hércules y presidente, respectivamente, firmaron ayer, en una notaría de Valencia, la compra del Hércules por 508.000 euros. Además, los dirigentes blanquiazules asumen los gastos de 100.000 euros correspondientes al procurador.

El Consejo del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) aprobó, la semana pasada, la adjudicación a la empresa Zassh Tecnológica Sociedad Limitada, de la que participan Ramírez y Portillo, de un lote accionarial que implica el control del club alicantino. La venta incluye el 15,07% de las acciones del Hércules y del derecho del crédito de 15.425.002,95 euros que ostenta el IVF frente a la Fundación del Hércules, en virtud del cual pesa un embargo sobre el 72,71% de las acciones del club, que ahora milita en Segunda B.

Para la adquisición de este lote de acciones se han tenido que realizar dos subastas. La primera quedó desierta el pasado verano y en la segunda las acciones fueron adjudicadas a la empresa Kuntajara, que presentó una oferta de 508.150 euros. Finalmente, esta adjudicación no se formalizó al considerar Kuntajara, propiedad de Juan Carlos Ramírez, que los gastos de notaría, unos 100.000 euros, eran excesivos, por lo que presentó ante el IVF un escrito de renuncia.

Posteriormente, Zassh Tecnológica Sociedad trasladó al IVF su oferta para quedarse con este lote de acciones por el mismo precio y en las mismas condiciones fijadas en segunda subasta.

Una vez formalizada la compraventa, el director del banco del Consell, Manuel Illueca, se felicitó por recuperar 600.000 euros, «a los que hay que añadir la adjudicación a favor del IVF del estadio Rico Pérez, mientras que el grupo inversor, actualmente con intereses en la gestión del propio club, tendrá una mayor estabilidad para acometer el reto del Hércules de ascender a Segunda División».