Las alegrías de uno, por pequeñas que sean, las magnifican las derrotas del vecino. Es la historia de la rivalidad, la historia de dos primos hermanos enfrentados por una carretera de ida y vuelta.
Hércules y Elche, separados por apenas 25 kilómetros, han escrito las páginas más doradas del fútbol alicantino a lo largo de su casi centenaria historia. Como si del célebre balancín de los parques infantiles se tratara, ambos equipos se han esquivado en los últimos 25 años y sólo han compartido nueve temporadas en la misma categoría. Esta semana vuelve en Liga el «clásico» alicantino por excelencia tras casi cinco años.
Pero la historia de un club es también la de sus gente; jugadores, entrenadores e incluso directivos. Desde los años veinte, fecha de fundación de ambas entidades, han sido muchos los protagonistas que cruzaron Torrellano para enrolarse en el eterno rival. Tratados como héroes y como villanos, fueron menos los que triunfaron por igual en los dos sitios.
Sin desempolvar demasiado la hemeroteca, el Hércules llega al derbi del próximo domingo dirigido por Claudio Barragán, una leyenda del Elche, principalmente por su época como futbolista, pero también fue entrenador. Como en su momento la leyenda blanquiazul Arsenio Iglesias, César Rodríguez, Mesones, Bordalás, Uribe, David Vidal, Marcel Domingo, Pagaza, Vicente Mir o Quique Hernández, técnico que ha dirigido en más partidos al Hércules en sus 95 años de vida.
Alineación de gala
Óscar Díaz, Juli y Javi Flores protagonizarán este domingo el duelo de los reencuentros, pero han sido más de cincuenta los futbolistas que han vestido las dos camisetas.
Si se hiciera un once ideal en la portería aparecería Pazos como titular indiscutible. En el banquillo, Toño, Valerio, Aragoneses y Juan Carlos. La línea defensiva la comenzaría Benito Sánchez en el lateral derecho, posición que también defendieron Redondo y el canterano herculano Carmelo Manresa.
Como centrales Samuel, que se perderá este derbi por sanción, y Cartagena, por delante de Lolo, Adolfo, Tortolero, Gustavo o Juanmi. En el lateral izquierdo surge Albacar, pero la lista en la zaga continuaría: Poyoyo, Sutter, Rayo y Rodríguez. La medular sería para el campellero Félix Palomares, que jugó en el Barça. Junto a él, Juan y Nano, ilicitano e ídolo herculano en el ascenso a Segunda de 2005. Tras ellos, Mantecón, Edu García, David de la Hera, Campos, José Luis Rodrigo «Rodri», Turiel, Manolo Pérez, Melgar, Rodri Campoy, Asián y Saavedra.
En la media punta aparecerían Kike Mateo, Dani Borreguero, Javi Flores, Eldin, Santos, Juli, Cristian, Patri, Quero, Ismael y Araujo I. Y como referencia en ataque sobresale Moisés, acompañado del paraguayo Romero y de Carlos Muñoz, internacional por España años más tarde. Aunque también dieron gloria a ambas aficiones Raúl Ivars, Lorenzo Antón, el goleador Illán, Nito, Luis Costa y más recientemente Óscar Díaz.
Un once, e incluso una plantilla, bien amplio y más que suficiente para sacar a Elche y Hércules del pozo de la Segunda B, división que desluce un derbi -como mínimo- digno de la categoría de plata. También lo fue de Primera, aunque del último ya hace casi 33 años y muchos jugadores de ambas plantillas no habían nacido.
De todos depende que esta rivalidad sana de derbi alicantino no muera. Y de que haya muchos más.
