«El fútbol es como una manta corta, si te tapas la cabeza te descubres los pies y si te cubres los pies te destapas la cabeza». Esta frase, acuñada a Tim, un entrenador brasileño de los años sesenta, explica a la perfección la convulsa realidad que vive el Hércules de Siviero.
Justo cuando la alarmante sequía goleadora de los atacantes con la que se empezó el curso parece haber sido atajada (Carlos Fernández y Óscar Díaz han sido los autores de los últimos cuatro goles del Hércules), salen al descubierto unas lagunas defensivas que penalizan con puño de acero la puesta en escena de Siviero.
Las jugadas de estrategia defensivas se han convertido en un auténtico quebradero de cabeza para el técnico argentino, consciente de que el Hércules es tremendamente vulnerable cuando el rival cuelga la pelota al área a balón parado. Cuatro de los últimos cinco goles recibidos por los blanquiazules llegaron de esta manera. Y tres de ellos firmaron amargas derrotas.
El primero de ellos fue de Gonzalo Verdú y sirvió para decantar la balanza en el derbi copero contra el Elche en un remate de córner. Acto seguido fue Rubiato en el campo del Ebro el que perforó la red tras un saque largo de banda del lateral Regino y siete días más tarde el Aragón volvía a rematar a gol un saque de esquina, pero esta vez fue intrascendente en el resultado porque el Hércules ya ganaba 3-0. Los fantasmas no se alejaron el pasado fin de semana y el Villarreal B consiguió la victoria nuevamente tras rematar en dos ocasiones una falta lateral que podía haber sido evitada.
La realidad es que la cifra de goles en contra del Hércules no es excesiva (la media dice que uno por partido), pero los paga excesivamente caros; sólo uno de los ocho encajados en Liga no le restó puntos (el del partido ante el Aragón).
Frágiles en la recta final
El otro dilema que planea sobre el Hércules 17/18 es la endeblez que muestra en la recta final de los partidos. Seis de los diez goles recibidos entre Liga y Copa esta temporada fueron a partir del minuto 75 y cuatro de ellos mermaron las aspiraciones blanquiazules. Ante Alcoyano y Badalona el gol recibido supuso un empate y ante Cornellà y Villarreal B, una derrota. Precisamente ante el filial amarillo los de Siviero encajaron el primer gol también en el último minuto de la primera parte, momento hasta el que habían sido ligeramente superiores que el rival.
Chechu no llega al domingo
Chechu Flores está descartado para el duelo del próximo domingo en el Rico Pérez ante el Peralada (18.00). El jienense evoluciona favorablemente de la lesión en el abductor pero los técnicos y los médicos creen que sería precipitado su regreso el domingo en un partido clave para el futuro de Siviero. Chechu Flores realizó el miércoles carrera continua en el estadio de atletismo del Monte Tossal y ayer no saltó al césped del Rico Pérez en un entrenamiento en el que se ejercitó sin problema Pol Bueso, que vuelve a estar disponible tras un inicio de Liga inédito.
Por su parte, el atacante Juli también está descartado, pese a que esta semana le retiran las grapas de su operación de urgencia de apendicitis. Una vez sin ellas, la idea del mediapunta alcoyano es reincorporarse al trabajo de manera paulatina para no recaer de su lesión en el sóleo.
